La mañana del día de Navidad se intuía de lo más feliz para Andrew Woodward, un joven residente en el Estado norteamericano de Georgia, pero acabó siendo una jornada para olvidar. El culpable: un gato doméstico.

Woodward se encontraba abriendo el regalo que Santa Claus le había dejado bajo el árbol de Navidad en la mañana del 25 de diciembre, y Jessica Freeman lo estaba filmando en vídeo para conservar el recuerdo para siempre.

El paquete en cuestión contenía nada más y nada menos que una flamante videoconsola. Santa dio en el clavo, porque Woodward se mostró gratamente sorprendido, y comenzó a agitarse y a emitir sonidos de alegría con efusividad.

En ese momento, entró el felino en escena, que al parecer confundió los gestos de Woodward por signos de amenaza ante los que defenderse, y atacó salvajemente al joven, a quien ha provocado heridas importantes.

En el vídeo, que ya ha sido visto casi 80 millones de veces, se aprecia cómo la mascota se abalanza directa e inesperadamente sobre el cuello de Woodward. El susodicho publicó después imágenes mostrando las secuelas del incidente, unas heridas en la cabeza y el cuello que a simple vista parecen de lo más dolorosas.