El exalcalde Sr. Negreira será recordado en Los Rosales por legar un mar de cemento en forma de pista de skate y en medio de un espacio natural. Como cualquier otra obra que se acometa en la actualidad puede verse repleta de grafitis y a menudo rodeada de todo tipo de desperdicios.

El nuevo Gobierno ha decidido abundar en el dispendio y las tres grandes torretas de iluminación con las que cuenta la pista permanecen encendidas todos los días hasta la una de la mañana contaminando de forma importante el descanso de quienes vivimos cerca de ella.

Los vecinos tenemos la impresión de que estén convocando a los chavales a la creación de un nuevo botellón que de conseguirse traería el desastre a un sinfín de ciudadanos cuyas viviendas (y por tanto dormitorios) dan al parque.

Es, por otra parte, triste observar desde mi casa un mar de luz sinsentido y adivinar en penumbra solo un poco más allá el obelisco Millenium consumirse entre tinieblas desde hace años.

Los ciudadanos exigimos que nuestros impuestos sirvan para procurar el bienestar de la comunidad pero nunca tolerar que se empleen en vulnerar y violentar derechos e intereses de los vecinos.

Juan C. Mella A Coruña