Escribo estas líneas para manifestar mi profunda admiración por los músicos que actúan y tratan de hacer un trabajo digno cuando la climatología es adversa. En concreto, estoy pensando en dos actuaciones muy diferentes entre sí pero que coinciden en que ambas tuvieron que bregar con la lluvia y el viento. Son la del Dúo Madrigales, en las Fiestas del Barrio de las Flores -el pasado día 22- y la del grupo musical Albéniz, al día siguiente. Son sólo dos ejemplos, de los muchos que existen, de músicos que, siendo profesionales o no, intentan alegrarnos el día, aunque éste sea literalmente horrible. Tengo que hacer mención (para ser justos) del público, entre el que me incluyo, que hemos acompañado a los músicos hasta que fue imposible continuar el concierto, en reconocimiento cariñoso de su esfuerzo y tesón. ¡Bravo por la música!

María José Viz Blanco

A Coruña