Se dice en un documental que, tras nuevos cálculos, los científicos llegaron a la conclusión de que la vida en la Tierra se extinguirá 30" antes de lo que estaba previsto.

A mí, personalmente, no me afecta demasiado porque, como lo administro bien, el tiempo siempre me llega: cruzo por los pasos para peatones y, si están regulados por semáforos, espero pacientemente a que me lo permita la luz verde. ¡Y, antes de irrumpir en la calzada, aún tengo tiempo para cerciorarme de que los conductores van a detener sus vehículos!

Pero entenderán que, como persona empática que soy, me preocupe por esas personas a las que el tiempo nunca les llaga: por no dar una vuelta de diez metros, cruzan al atajo calles con varios carriles y, si se tercia, con el niño de la mano (de la libre; la otra la necesitan para atender el móvil), y cuando lo hacen por los pasos para peatones, incluso estando regulados por semáforos, solo miran a que no se aproximen vehículos, aunque no es seguro que si se aproximan puedan verlos, porque van más pendientes del móvil que del tráfico. Y cuando son conductores, por no tener no tienen tiempo para abrochase el cinturón de seguridad, ni los dispositivos infantiles de retención, si viajan con niños.

Comprenderán, pues, mi inquietud por la noticia. ¿Cómo se van a arreglar esas personas ahora con 30" menos? Apenas les quedará tiempo para los wasaps.