Ahora que se ha dejado de hablar de Trump, me parece interesante retomar el tema de sus relaciones con algunos jueces. El veto migratorio decidido por el Ejecutivo, que Trump ha buscado legitimar, se ha topado con la decisión de los jueces que invocan la Constitución.

Barack Obama y otros presidentes también se vieron cuestionados por decisiones judiciales que limitaron sus decisiones políticas, pero el sistema de pesos y contrapesos es clave en un sistema de garantías que Trump debería acatar y defender.

En los sistemas representativos la clave de la acción política no está en la satisfacción automática de todas las demandas ciudadanas, sino en el ejercicio responsable del poder. De cómo se resuelva este primer encontronazo con la libertad de los jueces puede depender el rumbo de esta presidencia.