El rey Juan Carlos dio este miércoles su aprobación a la obra del pintor Antonio López La familia de Juan Carlos I y comentó: "Me veo fenómeno, pero ahora estoy mejor, más descansado". Tras contemplar la obra durante unos segundos en el Palacio Real de Madrid, don Juan Carlos reconoció que el cuadro "ha mejorado muchísimo" desde la primera vez que lo vio, cuando no le gustó. "Hace unos años no me gustaba". Preguntado por cuáles eran los elementos de la obra que habían cambiado, señaló el "color, las formas". "Ahora lo ha rehecho, ha mejorado muchísimo", añadió. La reina Sofía también se mostró satisfecha: "Me gusta mucho. Es precioso". Refleja "el antes y el después".

Veinte años después de su inicio, La familia de Juan Carlos I ya cuelga en la pared de la que será su casa permanente, incorporándose a la historia de cinco siglos del retrato real. Frente al cuadro El príncipe de ensueño, de Salvador Dalí, la esperada y ansiada pintura de Antonio López pone broche final a la magnífica exposición que Patrimonio Nacional dedica a la historia del retrato real a través de 114 obras.

En el propio catálogo de la exposición El retrato en las colecciones reales. De Juan de Flandes a Antonio López, se reconoce que pocas veces en nuestra historia reciente la creación de una obra de arte ha despertado un interés tan general, suscitando una expectación inusitada. Ésta se explica, en buena medida, por la propia naturaleza de la obra, las circunstancias de su proceso creativo y por la especialísima identidad de sus protagonistas.

El encargo realizado a finales de 1993 por Patrimonio Nacional a López "venía a suponer un arriesgadísimo desafío artístico e histórico para los pinceles de uno de nuestros más grandes artistas contemporáneos, que debía afrontar la plasmación de una imagen de la familia real española destinada a convertirse en el icono artístico del reinado de don Juan Carlos". Como tal desafío tomó el artista la obra, en la que ha trabajado hasta el último momento y que el presidente de Patrimonio Nacional, José Rodríguez-Spiteri, define con las propias palabras de López como un retrato "poderoso y de gran dignidad". Reconoció han sido "muy generosos con Antonio López y él ha sido muy participativo". "Hace año y medio le habilitamos un estudio y ha convivido con nosotros. Esta exposición ha sido un motivo que le ha animado a poner la firma y fechar la obra en 1994-2014 para que quedara patente que ha tardado veinte años en elaborar este cuadro extraordinario", dijo.

La pintura, de 3 por 3,39 metros, colgará en el salón de Alabarderos del Palacio Real, bajo la bóveda pintada en el siglo XVIII por Tiépolo. Este salón es previo al de Columnas, donde se suelen celebrar los actos oficiales. Así, el millón largo de personas que visitan anualmente el Palacio Real podrá contemplar el cuadro, al igual que los asistentes a las recepciones oficiales.

José Luis Díez, director de las Colecciones Reales de Patrimonio Nacional, consideró que La familia de Juan Carlos I es el colofón de la tradición que los retratos de familia siempre han tenido y que están caracterizados por la contención y la sobriedad.