A Silvia Abascal no le molesta hablar de su ictus, pero si está de promoción, como es el caso, cuando se acaba de estrenar en España la película Francisco, que cuenta la historia personal del Papa hasta su nombramiento, ella prefiere hablar de cine, de su proyecto. Después de tres meses de grabación en Argentina, donde se ha metido en el papel de una periodista agnóstica que sí cree en Francisco como persona, Abascal siente estos días el respeto que da enfrentarse a un estreno.

-Nos alegramos de volver a verle en un papel protagonista.

-Muchísimas gracias.

-¿Cien por cien recuperada del ictus que sufrió hace cuatro años?

-No, no me gustan las totalidades y menos...

Siga leyendo la noticia en Orbyt, o suscríbase a La Opinión de A Coruña y tenga acceso completo a todas nuestras noticias sin límites.