El alcalde de Oleiros tiene su casa en la calle Antonio Maceo, el nombre de un general cubano líder independentista de la segunda mitad del siglo XIX. Otro revolucionario de esta isla, "el hombre más importante del mundo desde el siglo pasado hasta ahora", ha sido su "líder": Fidel Castro. "Yo soy cubano", afirmó aún ayer Ángel García Seoane, al referirse a que fue nombrado Hijo Adoptivo de La Habana por sus años de defensa y ayuda al país. Una amistad que le llevó incluso a ser espiado por la CIA, la Central de Inteligencia norteamericana. También puede que le investigara el Mossad, tras el conflicto diplomático que abrió al llamar asesino al entonces primer ministro Ariel Sharon, y repartir camisetas en las que el líder israelí aparecía comiéndose a niños.

Castro fue su "referente" y parece que moldeó su forma de actuar. Forjado en la lucha vecinal contra los especuladores urbanísticos entre finales de los setenta y principios de los 80, García Seoane, Gelo, entró en el Concello en 1985, voló con dinamita el chalé de un vecino en una isla, bloqueó la comarca coruñesa en una manifestación con ayuda de solo un walkie talkie para reclamar mejoras en infraestructuras e incluso pasó por el calabozo por escribirle una carta en papel de lija al Gobernador Civil, visto que las anteriores las debía de haber usado para limpiarse sus nobles partes. También le mandó una caca de perro envuelta en papel de regalo a un ministro a finales de los noventa.

Este "republicano, castrista y anti-imperialista" gobierna desde hace más de treinta años, desde un partido que él creó, el municipio de Galicia con mayor renta per cápita, el concello al que van a vivir los empresarios más ricos -una media de 36.516 euros- que conducen por una avenida dedicada al Che o pasean junto a una estatua gigante de Guevara o por un parque con el nombre del héroe nacional cubano José Martí. Tampoco falta la calle Emiliano Zapata, el líder de la revolución mexicana.

En la urbanización en la que vive Ángel García con nombres de libertadores iberoamericanos como Simón Bolívar, no está sin embargo Fidel Castro. Como dijo en 2004, "Él no quiere ninguna calle mientras viva". Lo que hace pensar que la habrá. "Son ricos pero no son tontos, saben que aquí hay calidad de vida, infraestructuras, parques, jardines, educación, sanidad", ha repetido en muchas ocasiones.

La inauguración del parque y monumento a Martí en 1991 fue el origen del interés de la Inteligencia estadounidense por Gelo. El líder cubano le mandó una carta en agradecimiento por el homenaje el 27 de julio de ese año y fue interceptada por la CIA. La investigación siguió años después por los frecuentes viajes de Seoane a Cuba. Querían conocer sus vínculos políticos, personales y empresariales en Cuba y su actividad procastrista en España, ya que acudía habitualmente ante embajadas y consulados norteamericanos a protestar contra su política hacia la isla.

Sospechaban que personas próximas al Concello habían contribuido a burlar el bloqueo comercial decretado por Estados Unidos contra el régimen cubano al exportar productos prohibidos por la Ley Helms Burton. El propio regidor oleirense confirmó, tras desvelar este diario esa investigación de la CIA, que conocía que le vigilaban y que se hacía a través del CESID, el antiguo Centro Superior de Investigación de la Defensa española. Admitió también que participó, pero sin obtener beneficios personales, en una empresa mixta cubano-española constituida para favorecer la exportación a la isla caribeña de equipos informáticos y medicinas.

El regidor prestó ayuda a Cuba durante muchos años. Allí mandó repuestos de tractores, medicinas, equipos de diálisis y zapatos. También ha colaborado, y lo sigue haciendo, con muchos países de Latinoamérica como Nicaragua o El Salvador.

El Ayuntamiento de Oleiros declaró a Fidel Castro concejal honorífico en respuesta a la declaración del primer presidente autonómico Gerardo Fernández Albor, que propuso apredrearlo si visitaba Galicia -estaba de visita en Madrid-. El propio García Seoane, entonces con solo 32 años, junto con otros ediles, acudieron en persona a Cuba para entregarle al presidente el acuerdo municipal de su nombramiento el 7 de enero de 1984. Seoane ha compartido más de una docena de encuentros con Fidel Castro y ha viajado más de 50 veces a la isla. Allí tuvo y tiene aún familia y allí llevó a muchos empresarios para que invirtiesen en Cuba.

"Llevé a muchos empresarios, sin mediaciones. En el 89-90 Cuba estaba en una situación terrorífica de escasez. Allí fueron empresarios españoles a montar turismo. Cuba solo tiene que mejorar la economía, el resto es casi perfecto. Es el único país que Estados Unidos no pudo doblegar. Allí están los niños más cuidados y libres, de allí exporté yo para Oleiros lo de las aulas de la tercera edad", declaraba Seoane en un medio local el año pasado.

Antes de la llegada de la crisis económica, los jóvenes de Oleiros que participaban en actividades municipales tenían como premio al final un viaje a Cuba. Seoane les acompañaba siempre. El que fue el jefe de gabinete de Seoane, en un viaje a la isla se quedó tan encantado que ya no regresó. Allí se convirtió en el presidente de la Federación de Empresarios Españoles.

El despacho del primer edil en la Casa Consistorial también refleja su admiración por Fidel. Tiene dos fotografías con él -en una, también Gallego Fernández, vicepresidente del Consejo de Estado cubano, que también visitó el municipio oleirense en 1992 invitado por el alcalde- y otra con Raúl Castro, el hermano de Fidel, brindando en una comida. Tampoco falta la estatua del Che de la rotonda, en tamaño pequeño.

En 1992, que un alcalde de un concello relativamente pequeño de España le organizase un homenaje a Castro causó impacto. Fidel se alojó en el Hotel Araguaney de Compostela. Venía invitado por Manuel Fraga para conocer la casa de su padre en Láncara y en el hotel dio un discurso con simpatizantes del régimen cubano y autoridades, organizado por un emocionado Seoane. En el acto estuvo el líder nacionalista Xosé Manuel Beiras y el años después vicepresidente de la Xunta, Anxo Quintana. Al salir a la calle a Fidel le entregaron un espectacular caballo gris de crines negras, regalo de Oleiros y que llevaron para Cuba.

Al alcalde de Oleiros, que para hacer más singular aún su trayectoria, no le falta ni haber sido telonero de Julio Iglesias en 1969 y que suele disfrazarse casi siempre de guerrillero en Carnaval, suelen llamarlo los suyos: Comandante.