El rectorado de la Universidad coruñesa se fija como objetivo la participación de 7.000 estudiantes en su II Feira Europea de Emprego, en cuya primera edición se firmaron medio centenar de contratos entre los universitarios y las empresas que acudieron al certamen. La iniciativa se desarrollará los días 28 y 29 de este mes en el pabellón de deportes del campus de Elviña, en lugar del pabellón de estudiantes en el que se llevó a cabo el año pasado, con el fin de disponer de mayor amplitud de espacio.
El rector, José María Barja, recordó que cada año salen 3.000 titulados de las escuelas y facultades coruñesas, por lo que una feria de este tipo contribuye a facilitar su colocación. La participación de empresas extranjeras volverá a producirse en esta edición, factor que según Barja confirma que los estudios universitarios facilitan la movilidad laboral.
A lo largo de las dos jornadas de la feria se sucederán las presentaciones de ofertas de las empresas, mesas redondas y talleres, así como otras actividades que pretenden fomentar la relación entre empleadores y demandantes de trabajo. La principal novedad de la segunda edición del certamen serán los denominados café-negocios, en los que representantes de las compañías podrán establecer contactos con vistas a la realización de acuerdos comerciales.
El vicerrector de Relación Universidad-Empresa, Luis Barral, anunció que este año se efectuará un seguimiento de las relaciones que mantengan los estudiantes y las compañías en las semanas posteriores a la feria, ya que los datos disponibles a las contrataciones de la pasada edición sólo se refieren a las efectuadas durante su desarrollo.
El director xeral de Promoción do Emprego, Andrés Hermida, expresó el respaldo de la Consellería de Traballo a esta iniciativa y anunció la puesta en marcha por la Xunta de un Plan de Empleo Juvenil cuyo objetivo será la potenciación de contratos en prácticas para que se conviertan posteriormente en indefinidos.
También renovó su apoyo a la feria la Diputación, cuyo presidente, Salvador Fernández Moreda, destacó que ha sido pionera en Galicia y que en Santiago ya se proyecta una similar a la que el organismo provincial también respaldará.
El impacto de la crisis tiene consecuencias negativas para el empleo en todos los grupos de trabajadores, incluidos los universitarios, pero éstos tienen una ventaja cualitativa frente otros desempleados, según José María Barja. "Cuanto más nivel de educación se tiene, hay un mayor retardo en la colocación, pero a largo plazo se consigue una mayor estabilidad en el empleo", señaló el rector.
El director xeral de Promoción do Emprego coincidió en que la Universidad proporciona mayores oportunidades a los desempleados, ya que señaló que el colectivo con una mayor capacidad de inserción laboral en Europa son los titulados superiores.
