El Ayuntamiento considera rematado el grueso de su trabajo en el plan de erradicación del asentamiento chabolista de Penamoa y recurre a la Justicia para que ordene la expulsión de las veinte familias del poblado que han rechazado la propuesta municipal de realojo. Cerrado ya el plazo de adhesión al plan de integración de Penamoa, su primer paso ha sido remitir a los jueces el expediente completo que detalla, caso a caso, la situación de esas veinte familias que se resisten a abandonar sus chabolas. "Habrá una actuación judicial", advirtió ayer la concejala de Servicios Sociales.

Silvia Longueira compareció ante la prensa junto al coordinador de la comisión permanente de integración, el psiquiatra Fernando Márquez, para hacer balance de un programa que encara "la recta final, el camino más llano". La edil apeló a la ley de protección de datos para evitar concretar por qué esas veinte familias, de las 99 censadas en Penamoa, rechazan la mediación municipal. "Muchas veces -argumentó- ni siquiera han alegado motivos y han rechazado establecer cualquier contacto con los servicios sociales".

Las otras 79 familias ya están realojadas en pisos de A Coruña o de otros municipios, o enfilan esa salida. La comisión de integración ya ha evaluado 53 casos: 38 grupos de parientes habitan un piso y quince "estarán preparados para ir a vivir a una vivienda en los próximos meses", señaló Silvia Longueira. Las 26 que completan la relación de 79 familias que han aceptado adscribirse al plan de integración ultiman en la actualidad el proceso de adaptación a su nueva vida, paso previo a que les dé el visto bueno la comisión, constituida por el Ayuntamiento, la Xunta y asociaciones vecinales y sociales.

Con este balance, a falta de dos citas más de la comisión y a la espera de la intervención judicial, la concejala de Servicios Sociales aventuró un plazo para el final del poblado de Penamoa, con más esperanza que garantías: "No hay un plazo efectivo, pero en nuestras cabezas está que (ese terreno) tendría que estar liberado en el primer semestre (de 2010)".

El coordinador del comité valoró haber alcanzado "el 80% de adscripción voluntaria" al plan y lo presentó como un resultado "excelente", aunque, "obviamente", preferiría "haber llegado al 100%". La concejala garantizó que ningún realojo de habitantes de Penamoa se ha realizado "sin estar seguros de la viabilidad de la familia y de la buena acogida de las familias que las reciben". Silvia Longueira definió este plan de realojos como un "proceso contaminado" desde fuera, pero ejecutado "sin mácula".

La edil se refirió, a preguntas de los periodistas, a las críticas del grupo municipal del Partido Popular hacia la política de realojos promovida por el Ayuntamiento. "Sus palabras -replicó- son un insulto a la inteligencia humana". El PP anunció ayer que, en el pleno municipal de enero, preguntará al Gobierno local por lo que considera "el incumplimiento del plan especial de Penamoa".

Vecinos de O Ventorrillo denunciaron que la Policía Local acudió ayer al barrio a intentar "identificar" a las personas que, el lunes, habían pegado carteles con críticas al alcalde, Javier Losada, la concejala de Servicios Sociales y el subdelegado del Gobierno, José Manuel Pose, por no haber erradicado la venta de droga en Penamoa antes de final de año, como habían prometido.