La Universidad de A Coruña retiró el recurso que interpuso contra la institución académica de Santiago por convocar plazas docentes para el hospital público coruñés. Las tres universidades gallegas, la Consellería de Educación y la de Sanidade llegaron ayer a un acuerdo para que sea una comisión mixta -formada por representantes de cada una de las entidades firmantes- la que designe, a partir del próximo curso, los docentes que impartirán las clases en cada curso y los contenidos que han de transmitirles a los alumnos en los hospitales universitarios y en otros de la red del Sergas en los que se impartan clases del Grado de Medicina.
El rector de A Coruña, José María Barja, presentó en noviembre un recurso contencioso-administrativo contra la Universidad de Santiago para paralizar la convocatoria de plazas docentes en los hospitales de A Coruña y Vigo, ya que creía que era un concurso irregular. Conselleiros y rectores firmaron el acuerdo con el objetivo de mejorar la formación de los alumnos del Sistema Universitario de Galicia y optimizar el empleo de recursos materiales y humanos. Barja confía en que el pacto ayude a "eludir desencuentros" futuros entre los campus gallegos.
El próximo curso, que comenzará en septiembre de 2010, la docencia clínica del Grado de Medicina se impartirá en los hospitales universitarios con la participación de otros centros de la red del Sergas, en los que ejercerán las nuevas figuras del profesor docente investigador, vinculado a los centros sanitarios, y del profesor colaborador docente.
El acuerdo crea esta figura del profesor colaborador docente como un elemento "inédito y propio" de Galicia, según explicó el rector de la Universidade de Santiago, Senén Barro, que será "concretado" en la primera reunión de la comisión mixta, que se celebrará el próximo día 5 de marzo. Tal y como explicó el rector de la Universidade de Vigo, Alberto Gago, esta figura docente dependerá administrativamente de la Universidad a la que pertenezca el hospital donde preste sus servicios, aunque la coordinación de los contenidos que imparta será responsabilidad de la Universidad de Santiago en todos los casos, para unificar la docencia. Es un paso hacia la solución de la implantación del grado compartido que la conselleira de Sanidade ofrecía como solución para las demandas de las Universidades de Santiago y A Coruña.
"Lo que es importante es la colaboración de las universidades en una dirección compartida que aspira a más", explicó Gago, que consideró que este acuerdo es "una solución que compagina la participación y la descentralización, garantizando la coordinación académica". Para lo que no han dado una solución todavía los padres de la comisión mixta es para la formación teórica, ya que han dejado en el aire la posibilidad de permitir que los alumnos la estudien también en el centro en el que realicen las prácticas.
