Un residuo de la producción láctea que supone un grave problema ambiental por su impacto contaminante, el suero, pasará a ser el principal recurso energético de una fábrica de quesos de Arzúa gracias a una investigación de la Universidad de A Coruña. El grupo de Expresión Xénica en Fermentos e Aplicacións (Exprela) ha patentado el proceso para la conversión del suero láctico en bioetanol, combustible que será aprovechado en la factoría Queizuar, fabricante de los quesos Bama, para autoabastecerse de energía.

El equipo de 16 científicos que coordina Esperanza Cerdán trabaja desde 1988 con levaduras y combina la investigación fundamental con la aplicada, lo que le permitirá poner en marcha este año la primera planta piloto de fabricación de bioetanol a partir del suero de la leche. La iniciativa se llevará a cabo mediante un convenio de colaboración de Queizuar, que no solo conseguirá eliminar un producto nocivo para el medio ambiente, sino también obtener energía para su actividad.

Exprela pretende que la fábrica de quesos llegue a obtener mediante este sistema toda la electricidad que precisa. Esperanza Cerdán explica que el suero de la leche puede convertirse en una alternativa a la producción de bioetanol mediante vegetales como el maíz, lo que reduciría el incremento de precios que sufre este producto a causa de la elevada demanda existente.

Otra de las líneas de investigación que desarrolla el grupo Exprela consiste en el abaratamiento de la producción de enzimas de organismos termófilos, ya que pueden ser empleadas a altas temperaturas. Las aplicaciones de estas enzimas son múltiples en la fabricación de alimentos, bebidas, fármacos y detergentes, así como en los análisis de ADN en investigaciones criminales o en pruebas de paternidad.