Los vecinos del Barrio de las Flores afectados por la instalación de una antena de telefonía sólo confían en el viento. El huracán Xynthia consiguió hace dos meses derribar el repetidor que, según los perjudicados, ya había ordenado retirar un juez. Pero la tregua sólo duró dos meses y los operarios volvieron a instalar el poste de comunicación. "Es increíble, vuelven a ponerlo. Estamos todos muy disgustados", asegura una de las afectadas por la colocación de la antena, situada en un el edificio número 3 de la calle Claveles.
Los operarios de la empresa instalaron el repetidor ante la atónita mirada de los vecinos, que confirmaron sus sospechas sobre lo "poco" que tardaría la compañía en volver a colocar el poste que había estado en el tejado del inmueble desde hace más de diez años. La mayoría de los residentes en la calle Claveles está en contra de la instalación de telefonía, pero hay vecinos que la apoyan. "Los del edificio la quieren porque les pagan 8.000 euros por tenerla y así no tienen que pagar la comunidad", asegura una de las perjudicadas.
El Instituto Galego da Vivenda e Solo advirtió en 2001 a la empresa de telefonía de que cometía una "infracción grave" al colocar el repetidor en el Barrio de las Flores. La compañía, sin embargo, ignoró a la Xunta, por lo que los perjudicados acudieron a los tribunales. Los residentes en los edificios colindantes al inmueble en el que está colocado el repetidor insisten en que es "ilegal" porque un juez ordenó su retirada.
"Queremos que la quiten porque notamos que aumentaron las enfermedades en el barrio. A la gente le duele más la cabeza y cerca de la antena hay tres colegios y una guardería", denuncia una de las vecinas de la calle Claveles. Los afectados advierten a la empresa de que continuarán "luchando" para que cumpla la sentencia aunque admiten que están "cansados" porque hace más de diez años que el repetidor está en el tejado de la vivienda del Barrio de las Flores.
El urbanista catalán Joan Busquets, encargado de realizar el Plan General de Ordenación Municipal, incluyó la instalación de telefonía ubicada en la calle Claveles en un informe sobre la presencia de postes de comunicación peligrosos situados cerca de centros escolares y edificios públicos. Busquets criticó la existencia en la ciudad de otras 26 antenas de telefonía instaladas en las proximidades de colegios, ambulatorios, parques, residencias y centros geriátricos.
Los afectados por la colocación del repetidor exigen a la empresa que acate la sentencia que le obliga a retirarla. Los residentes en la calle Claveles piden, además, que tenga en cuenta los informes negativos del Instituto Galego da Vivenda e Solo y del encargado de elaborar el plan general. Por el momento, la instalación de telefonía vuelve a coronar el tejado del inmueble del barrio de las Flores. Los afectados agradecen al Xynthia los dos meses que les dio de tregua. Ahora retomarán su batalla contra la empresa.
