Los jueces investigan a seis comunidades de propietarios de la ciudad por piratear la señal de Canal Plus. Los vecinos implicados, que tienen acceso a unos 600 canales de televisión digital, podrían ser acusados de cometer un delito contra la propiedad intelectual o de defraudación de telecomunicaciones. En caso de ser condenados, los residentes en los inmuebles se enfrentarán a penas de prisión que oscilan entre los seis meses y los dos años y a pagar indemnizaciones millonarias, que se establecen en función del tiempo que hayan utilizado la señal pirata.

Los vecinos que acceden de forma fraudulenta a los contenidos de Canal Plus, según fuentes especializadas en este tipo de delitos, suelen contratar un decodificador a nombre de uno de los residentes en el inmueble, manipularlo y colocarlo en un lugar común del edificio para que desde allí dé cobertura a todas las viviendas. En estos casos todos los habitantes del bloque están implicados y la factura de la suscripción suele incluirse entre los gastos comunitarios.

En algunos casos los acusados modulan la señal codificada para que baje por la antena colectiva en abierto, por lo que todo el edificio tiene acceso a las televisiones de pago. Otro de los modos de piratear la señal es a través de páginas web en las que se facilitan los códigos para acceder a Canal Plus de forma gratuita. En la mayoría de los foros o blogs llaman "flores" a las claves. La empresa cambia a menudo los códigos, pero las personas que se lucran desvelándolos los rastrean y a los pocos días los cuelgan en sus páginas web. Los especialistas en descubrir las "flores" cobran por la publicidad que insertan en sus foros o en sus blogs. Los gestores de ese tipo de páginas web suelen ser jóvenes aficionados a la informática. En uno de los casos que investigó un juzgado estaba implicado un menor, por lo que son los padres los que deben hacerse cargo de pagar las indemnizaciones si el Juzgado de Menores condena a su hijo.

En Novo Mesoiro hay treinta vecinos imputados por cometer un presunto delito contra la propiedad intelectual. La juez los llamó a declarar la semana pasada porque Canal Plus denunció que en el edificio en el que residen pirateaban los canales de pago. En la zona de A Gaiteira la justicia investigó a tres bloques de viviendas por acceder gratis a la televisión digital. El decodificador que había contratado un vecino de uno de los inmuebles fue localizado en el trastero de un edificio situado tres portales más abajo. Las casas estaban interconectadas por los garajes, por lo que manipularon el receptor para que diese cobertura a las tres comunidades.

En la ciudad, por el momento, los habitantes de seis inmuebles están siendo investigados por cometer un presunto delito contra la propiedad intelectual, pero Canal Plus ya presentó denuncias contra otras tantas comunidades vecinales, así como contra bares y hoteles que también son sospechosos de piratear la señal. Algunos establecimientos hosteleros, según los expertos, pactan con los vecinos de los pisos que hay a su alrededor para defraudar a las empresas que emiten canales por satélite. Uno de los beneficiarios contrata el servicio y manipula el receptor para que el local y los residentes en el edificio más cercano tengan acceso a los contenidos.

"En algunos bares emiten Canal Plus sin tener el decodificador porque está en algún lugar común del inmueble", asegura uno de los especialistas, quien destaca que hay hoteles que anuncian en sus páginas web que ofrecen más de 600 canales en sus habitaciones cuando sólo tienen contratado un dispositivo. Normalmente, los hoteles disimulan el decodificador introduciéndolo dentro de algunos de los cajones de sus recepciones.

Cuando la juez llama a declarar a los imputados hay versiones para todos los gustos, desde el que reconoce que la comunidad llegó a un acuerdo para piratear la señal hasta el que alega que poniendo el receptor en el garaje ve mejor los canales de pago. "No es disculpa porque lo que hacen es transformar la señal al mismo tipo que por la que llegan los canales generales", subraya uno de los expertos en estos casos. Hay implicados que incluso niegan haberse dado cuenta de que en sus televisiones tenían 600 canales. "Tampoco es cierto porque ahora se sintonizan automáticamente", asegura uno de los especialistas en procesos judiciales contra la propiedad intelectual. Algunos tratan de evitar sentarse en el banquillo de los acusados y antes de que Canal Plus detecte el pirateo llama a la empresa y denuncia que sus vecinos acceden gratis a la señal.

La empresa afectada tiene un medidor de frecuencias con el que detecta cuántas personas ven canales de pago en los edificios. Si en un inmueble sólo hay contratado un decodificador y varios residentes en él están viendo los contenidos de Canal Plus salta la alarma. La compañía denuncia y comienza un procedimiento judicial por vía penal contra los implicados.