Un día después de las escuelas infantiles gestionadas por la Xunta, los siete centros de este tipo dependientes del Ayuntamiento comenzarán hoy su actividad. Los centros de Novo Mesoiro, Elviña, O Castrillón, Palavea, Os Rosales y los dos de Monte Alto acogerán durante este curso a 640 pequeños de hasta 3 años de edad, que se sumarán a los 336 que fueron admitidos en las guarderías de la administración autonómica, situadas en O Ventorrillo, Barrio de las Flores, Elviña y Orillamar.
El Gobierno local destacó ayer que es la Xunta la administración responsable de ofertar este servicio y que la red de centros del Ayuntamiento tiene por finalidad cumplir el "compromiso con la educación y con la conciliación de la vida familiar y laboral". También puso de relieve el Ejecutivo municipal que el volumen de plazas que proporcionan sus guarderías duplica al de la Xunta, que prevé abrir a finales de este año otros dos centros en Monte Alto y Eirís, con lo que su oferta se incrementará en 160 puestos escolares.
Las 976 plazas disponibles en la actualidad en las escuelas infantiles públicas no logran satisfacer en absoluto la demanda existente en la ciudad, según el informe del Valedor do Pobo del año 2009, en el que se señalaba que en la ciudad existía una lista de espera de 1.500 niños para ingresar en estas instalaciones. Esta cifra hacía de A Coruña la localidad gallega con una mayor necesidad de plazas, ya que en Vigo, con una población mayor, los solicitantes no admitidos llegaron a 1.400, mientras que en Santiago se situó en 800.
El presidente de la Federación Gallega de Asociaciones de Padres de Centros Públicos, Virgilio Gantes, propuso ayer que la Xunta de Galicia amplíe el número de plazas mediante el aprovechamiento de las aulas que queden vacías como consecuencia del reagrupamiento de alumnos en los tres primeros cursos de Primaria se aprovechen para ubicar escuelas infantiles.
En declaraciones a Radio Coruña, Gantes señaló que es la Consellería de Educación y no la de Traballo e Benestar la responsable de regular la actividad de las escuelas infantiles, de acuerdo con las disposiciones de la Ley de Ordenación Educativa. El portavoz de las APA públicas reclamó además que las guarderías no cierren durante las vacaciones, ya que entiende que ofrecen un servicio a la sociedad.
Este curso escolar, sólo la mitad de las familias con niños nacidos en este mismo año que reclamaron una plaza en las escuelas infantiles municipales obtuvieron un puesto, ya que sólo se admitieron 111 de los 224 pequeños para los que se pidió la inscripción. La guardería de O Castrillón, en la que se ofrecían 16 plazas para recién nacidos, es la que registró una mayor demanda, con 50 solicitudes, aunque el centro de Elviña vivió una situación similar al recibir 47 peticiones para otras 16 plazas.
La admisión en las escuelas infantiles municipales prima la residencia de la familia en la ciudad y su proximidad al centro elegido, así como a las rentas familiares más bajas. El Ayuntamiento estima en 2.640 euros el coste anual de cada plaza de sus guarderías, de las que subvenciona más de la mitad. Las familias aportan una cuota mensual de 110 euros, aunque puede reducirse en función de los ingresos hasta los 47 euros y complementarse con otras ayudas municipales.
Los servicios que proporcionan los centros son una jornada escolar de 6 horas de lunes a viernes, orientación educativa, comedor y jornada ampliada mediante horas complementarias.
