La Autoridad Portuaria asegura que la situación de endeudamiento progresivo que provocan las obras de la dársena exterior se recoge dentro de su plan de empresa y de su programa financiero para hacer frente a la millonaria inversión que tiene que realizar en punta Langosteira, agravada tras los sobrecostes detectados en el proyecto y que, según el último dato, se elevaban hasta los 283 millones. El informe de cuentas de 2009 destaca que la ejecución del futuro puerto supone a la institución marítima una deuda bancaria que, a 31 de diciembre, ya alcanzaba los 106,9 millones, un préstamo que deberá devolver a largo plazo.
La entidad que preside Enrique Losada asume que la deuda se deriva sobre todo de la fuerte inversión acometida en Langosteira. Sin embargo, el Puerto matiza que existe un "plan a largo plazo" para contrarrestar los créditos bancarios y permitir el "equilibrio financiero" de la institución. La principal misión de la Autoridad Portuaria coruñesa es cumplir su objetivo de abonar año a año el endeudamiento motivado por los préstamos. A 31 de diciembre, sólo en las obras de la dársena exterior, la deuda a largo plazo era de 106,9 millones, 48 más que doce meses antes.
El endeudamiento engorda debido al crédito concedido en 2006 por el Banco Europeo de Inversiones para construir el puerto exterior de Langosteira. El primer pago para la amortización de este préstamo será en 2013, con la testimonial cifra de 645.000 euros. Con cinco años de carencia, el crédito asciende a 130 millones. A esta cifra, habrá que añadir a partir de este año otros cincuenta millones de un préstamo puente firmado con Banesto, La Caixa y Banco Popular; y desde 2011, el crédito de 240 millones que empezará a desembolsar el Instituto de Crédito Oficial (ICO) fruto del acuerdo entre la Autoridad Portuaria de A Coruña y Puertos del Estado, dependiente del Ministerio de Fomento.
La Autoridad Portuaria debe hilar fino para cuadrar sus cuentas. En 2008, los 58,9 millones de endeudamiento bancario a largo plazo suponían el 12,9% del presupuesto; mientras que el año pasado llegó al 18,7%, pues la deuda alcanzó los 106,9 millones de euros y el presupuesto total de la entidad marítima fue de 570.
La deuda a largo plazo es la principal preocupación de la Autoridad Portuaria de cara a su futuro "equilibrio financiero". Además, la entidad que desde junio del año pasado preside Enrique Losada presenta un endeudamiento a corto plazo que confía en finiquitar sin problemas: a 31 de diciembre eran 18,66 millones. En este caso concreto, el dinero pendiente de pagar era sobre todo con empresas que trabajan tanto en punta Langosteira como con el Puerto en otros proyectos. La institución marítima justificó ayer que esta deuda corresponde, en su mayoría, a facturas que llegaron a finales de 2009 y que quedaron pendientes de pagar a lo largo de este ejercicio.
Un total de cuarenta ingenieros -32 de la Ordem dos Engenheiros da Regiao Norte de Portugal y ocho del Colegio de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos de Galicia- conocieron ayer punta Langosteira. "Es una obra importante, digna de ser visitada no sólo por los ingenieros", destacaron desde la agrupación portuguesa. En la imagen, los técnicos que participaron ayer en el recorrido por la futura dársena. / Redacción
El Puerto de A Coruña ha pagado los dos últimos años el Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI) al Ayuntamiento. Pero lo hizo en contra de su voluntad, pues ya ha recurrido las contribuciones de 2008 y 2009. En breve, tocará el turno de la factura correspondiente a este ejercicio. La institución marítima afirma que abonó las cantidades con el objetivo de que, al final, el Gobierno municipal tenga que devolver el dinero.
"Para simplificar los procesos de reclamación correspondientes, la Autoridad Portuaria ha procedido al pago de la totalidad de liquidaciones giradas tanto en 2008 como en 2009, siendo el pago motivo de garantía en los procesos, de tal modo que en caso de obtener resoluciones favorables en los distintos recursos o reclamaciones iniciados se solicitará en su momento la devolución de ingresos indebidos", defiende el Puerto en su balance de cuentas de 2009. La institución marítima ha variado su estrategia pues, por ejemplo, también llevó a los tribunales al Ayuntamiento por el IBI de 2003 y 2005 pero, en este caso, se negó a abonar los recibos.
El Puerto coruñés analiza con la Gerencia Regional del Catastro los datos existentes en las bases de datos del organismo estatal, con el que trabaja en la identificación, la naturaleza y la superficie de sus bienes inmuebles.
