El "cigarrón" convocado esta mañana en A Coruña para protestar por la entrada en vigor de la ley antitabaco, que desde el pasado día 2 de enero prohíbe fumar en el interior de los espacios públicos cerrados, ha logrado reunir solamente a cinco personas en la plaza de María Pita.

"Serán más cuando los bares comiencen a notar en sus arcas la repercusión. Ahora no sienten la necesidad de manifestarse", ha afirmado en declaraciones a los medios Paco García, médico de profesión, y que ha sido uno de los pocos fumadores que se ha acercado a la plaza de María Pita esta mañana.

La nueva ley, que modifica la normativa anterior de 2006, ha sido calificada por este colectivo de fumadores como "hipócrita" ya que "no puedes vender un producto y prohibir su consumo", ha apuntado García.

Además, ha señalado que es "ideológica" e "ilegítima", ya que fomenta la "división social" e "invade espacios personales de libertad".

Uno de los aspectos más criticados por este colectivo en defensa del tabaco es el "sistema de delaciones" impulsado por el Gobierno y que ha llevado ya a presentar más de 30 denuncias de usuarios por incumplimientos de la ley antitabaco en empresas y organismos públicos de Galicia.

"No puedes convertir a los hosteleros en policías", ha afirmado García al respecto.

García ha reconocido los efectos "nocivos" del tabaco - "los estudios lo demuestran", ha señalado-, pero ha aludido a factores genéticos como desencadenantes de las enfermedades.

"Quieren criminalizar una costumbre social", ha afirmado García, quien ha apostado por recuperar la Ley de 2006, ya que "respetaba los derechos de todos".

Asimismo, ha negado que la nueva normativa "venga impuesta por Europa", a pesar del objetivo expresado públicamente por la Comisión Europea de ampliar la prohibición de fumar en espacios cerrados en todos los Estados miembros en 2012.

"España no es Chipre o Reino Unido", ha sentenciado García aludiendo a las peculiaridades "sociales" del ocio en España.