El padre acusado de abusar de su hija cuando tenía entre siete y nueve años sostuvo ayer durante el juicio que la menor es propensa a "fabular". El procesado negó todos los hechos que le imputa la Fiscalía, que exige que sea condenado a 16 años de cárcel. El sospechoso subrayó ante los magistrados que nunca realizó tocamientos a la niña y también negó haberla violado.

Los forenses que declararon en la vista oral, que fue a puerta cerrada, aseguraron que las pruebas que le practicaron a la denunciante indican que no sufrió ninguna violación. "Atribuye las acusaciones de su hija a que su exmujer le hablaba explícitamente de sexo cuando era pequeña, así como a la capacidad inventiva de la niña. La menor, en una ocasión, denunció que un monitor del hogar infantil había abusado de ella y se probó que no era cierto. El padre dice que su hija está resentida porque lo culpa por estar internada en el centro. Él tenía la custodia, pero no podía mantener a ella y a su hermano", relata una fuente cercana al caso. Una de las psicólogas que examinaron a la pequeña y que declaró ayer en el juicio como testigo, sin embargo, recalcó que la versión de la niña es "creíble".

El procesado, que estuvo asistido durante la vista oral por el letrado José Ramón Sierra, también achacó las afirmaciones de la criatura a que es "víctima" de la "mala relación" que tiene con su expareja y madre de la niña. El acusado, además, señaló que sospecha que su excompañera sentimental tiene "algo que ver" con la denuncia interpuesta por la niña.

La menor mantuvo en el juicio, celebrado en la sección primera de la Audiencia Provincial, que su padre abusaba de ella y que la obligaba a ver vídeos pornográficos. La declaración de la niña tuvo que ser interrumpida porque sufrió un ataque de ansiedad.

La Fiscalía acusa al imputado en su escrito de calificación de cometer un delito continuado de agresión sexual y otro continuado de provocación sexual, por los que exige al tribunal del alto órgano provincial que le imponga 16 años de cárcel. El representante del Ministerio público también pide a los magistrados que condenen al sospechoso a indemnizar a su hija con 60.000 euros por los daños morales que le causó.

"Le exhibía a menudo películas pornográficas a la menor con una doble finalidad: por un lado, la de aleccionarla sobre las prácticas sexuales que pretendía que ella realizara; y, por otro, la de convencerla de que las relaciones sexuales entre padre e hija eran normales", destaca el fiscal en su informe sobre los hechos, que presuntamente sucedieron entre los años 2007 y 2009.

La acusación afirma que las relaciones sexuales que supuestamente mantuvo el procesado con su hija se produjeron desde que se divorció de su mujer. El fiscal relata que el imputado aprovechaba "cualquier momento" para quedarse solo con la niña y abusar de ella. El representante del Ministerio público también asegura en su escrito de calificación sobre los hechos que el sospechoso dormía a diario con su hija.