La empresa concesionaria de limpieza, Cespa, contestó ayer a las denuncias de los trabajadores de recortes en las nóminas de varios de ellos como represalia por las críticas al funcionamiento de la compañía. La dirección niega que se hayan realizado remuneraciones "inferiores a las cantidades que corresponden" y admite que se hicieron variaciones en 14 salarios por ser empleados que sobrepasaban los seis meses de contrato temporal. "La ley establece la regularización fiscal de todo el periodo, que es el ajuste realizado por la compañía", explican fuentes de Cespa.

La empresa defiende que estos operarios percibían un tipo de IRPF del 2% y que, acabado el periodo del contrato, se realiza el cambio por lo que fue ésta la "casuística", añade, que se registró en la última nómina. Afirma que se trata de un trámite que ocurre todos los años con los miembros de la plantilla sin empleo fijo y que, en todo caso, se cumple "escrupulosamente" la normativa fiscal vigente.

Los responsables de Cespa apuntan que "siempre" han abonado los salarios de sus trabajadores con todos los conceptos a los que tienen derecho en función del convenio colectivo y que nunca se realizaron ingresos "inferiores a las cantidades que corresponden". Recuerda que los importes retenidos se ingresan en la Agencia Tributaria.