Ante el recorte de la Consellería de Sanidade, que redujo a cero la subvención de 6.428 euros que había percibido en 2010, el Colectivo Moucho confía en la promesa del concejal de Servicios Sociales, Miguel Lorenzo, de que se ampliará la ayuda municipal para el próximo año. Fue en un encuentro informal entre el edil y la presidenta de la entidad, Ana Naya, en el que ambos hablaron sobre la delicada situación por la que pasaban los programas antisida, pero no concretaron a cuánto podría ascender la aportación, que hasta ahora era de 500 euros, además de la cesión del local donde se ubica la agrupación.

Decenas de personas vinculadas al colectivo se concentraron ayer frente a la delegación autonómica para denunciar la eliminación de la ayuda y alertar de la "limitación" que supone para la ayuda a los usuarios. Sanidade había alegado que las dificultades económicas impedían mantener las ayudas a las asociaciones antisida de la ciudad. Además, afirmaba que el trabajo realizado hasta ahora había "dado sus frutos" y que la situación del VIH en Galicia estaba por debajo de los índices estatales. La consellería hablaba de "optimizar" las ayudas.

Naya explica que están logrando mantener el número de beneficiarios, la mayor parte drogodependientes, que son una decena cada día, pero que han tenido que pedir ayuda al Banco de Alimentos, por ejemplo, para poder servirles desayunos mientras desarrolla los diversos programas.

También tienen más dificultades, añade la presidenta de la agrupación, para los traslados a reuniones, charlas o repartos de preservativos, que antes sufragaban con la ayuda de la Xunta y que ahora aportan de sus bolsillos. Aunque sin muchas esperanzas, la agrupación solicitará una reunión con la conselleira de Sanidade, Pilar Farjas, para exponerle la situación e intentar que dé marcha atrás a la decisión de retirar la subvención. "No creemos que nos vayan a echar una mano, pero hay que intentarlo", lamenta Naya, que apunta que también están intentando que la Diputación pueda ofrecerles alguna ayuda de tipo económico.

La presidenta del Colectivo Moucho defiende que las acciones que llevan desarrollando en los últimos meses han tenido éxito y por eso reclama que se mantenga la subvención autonómica. Los programas en marcha tratan sobre el VIH, la hepatitis, las enfermedades de transmisión sexual y sexualidad y, según Naya, "han dado buenos resultados porque se ha concienciado a los usuarios". Debido a la falta de fondos, la entidad está ahora basando sus iniciativas en juegos más que en teoría, como antes, porque, alerta, tampoco tienen dinero para pagar a los monitores que impartían las charlas o, por lo menos, abonarles el desplazamiento.