Los litigios que habían enfrentado a un hombre y una mujer de Curtis con un vecino suyo por la propiedad de dos fincas culminaron con la ocupación ilegal de los terrenos, según el informe elaborado por el fiscal, que solicita para los acusados una multa de 5.400 euros para cada uno de ellos al considerarles autores de un delito de usurpación.

La pareja se desplazó a una de las parcelas en mayo de 2005 y realizó trabajos agrícolas como el paso de una desbrozadora y de arados, con lo que preparó el suelo para la siembra de patatas en surcos, tarea que repitió días después en una finca próxima.

En ese segundo caso incluso llegaron a colocar un cierre de la parcela. Al mes siguiente, los acusados regresaron a los dos terrenos para realizar podas y talas de árboles, así como la plantación de verduras. El fiscal señala que estas personas "tenían perfecto conocimiento" de que las fincas no les pertenecían, puesto que existían pleitos civiles anteriores que habían determinado que la titularidad era de un vecino, por lo que califica su actuación como un delito continuado de usurpación y valora los daños cometidos en las fincas en 180 y 110 euros respectivamente, que deben serle abonados al propietario.

A esta cantidad, deben añadir la multa que se solicita para cada uno de ellos, que consiste en 30 euros diarios durante 6 meses.