El carril bus contribuiría de un modo más eficaz a mejorar el transporte urbano en A Coruña y a hacerlo más atractivo para los ciudadanos, en opinión de los autores del plan de movilidad encargado por el anterior Gobierno local, que defiende su implantación en las calles con una media de paso de un autobús cada cuatro minutos. La Agencia de Ecología Urbana de Barcelona, responsable de este documento, estima que el carril bus reduce el tiempo de viaje debido al aumento de la velocidad de los autobuses, aunque señala que este objetivo se consigue especialmente con el modelo de "prioridad semafórica" para estos vehículos, el que ahora plantea aplicar el nuevo Ejecutivo municipal en sustitución del existente.

Pero frente a la tesis del Gobierno local, que opta por suprimir el espacio en exclusiva para el paso del bus y alega que la frecuencia de paso del servicio es superior a cuatro minutos, estos expertos defienden que en las calles con mayor frecuencia de tránsito del transporte público existan viales segregados para estos vehículos, mientras que en aquellas que no dispongan de una frecuencia tan elevada, se ensanche uno de los carriles hasta los 3,25 metros para facilitar la circulación de los autobuses. La instalación del carril bus tendría que ir seguida además de una campaña de sensibilización para evitar la invasión del vial por los vehículos privados y prevenir los accidentes.

También proponen la instalación en las paradas de plataformas que hagan más fácil la subida y la bajada a los viajeros, ya que además impiden el estacionamiento incorrecto de vehículos.

En cuanto a los recorridos en los que debería existir carril bus por tener una frecuencia superior a cuatro minutos, el plan sugiere trasladar el de Federico Tapia a Juan Flórez, de modo que pueda implantarse en ambos sentidos de la circulación. Otros viales para los que se plantea son la calle Orillamar, la de la Torre entre la avenida de Hércules y la plaza de España, las calles Panaderas y Orzán en todo su trazado, así como la de San Andrés entre el Pórtico de San Andrés y la plaza de Pontevedra.