El Tribunal Superior ha anulado las bases de la convocatoria de doce plazas para la Policía Local (092), cuyas pruebas finalizaron en abril y mayo del año pasado, convocadas por el anterior Gobierno local. La razón, que no incluía la exigencia de demostrar dominio de la lengua gallega por parte de los aspirantes. La Confederación Intersindical Galega (CIG) pidió que se anulasen estas bases y, según publicó ayer el Boletín Oficial de la Provincia (BOP), el Tribunal Superior le ha dado la razón.

El Ayuntamiento ha asegurado que ejecutará la sentencia, que mantendrá las notas de los aspirantes a las plazas -que son de promoción interna- y que añadirá una prueba de treinta minutos de una traducción del castellano al gallego o viceversa, para todos aquellos candidatos que no puedan acreditar que poseen el certificado de capacitación lingüística Celga IV o título equivalente. No habrá puntuación, solo una nota de apto o no apto. El representante de la CIG en el Concello asegura que la invalidación de las bases de las oposiciones hace que todo el proceso sea nulo, aunque el Gobierno local estima que no es así, que simplemente tiene que hacer una tercera prueba adicional para todos aquellos candidatos que no cuenten con un certificado que acredite que tienen un buen dominio del gallego.

Las oposiciones ofrecían tres plazas de inspector de la Policía Local, siete de oficiales del cuerpo, una de intendente y otra de inspector principal de la Policía Local. En la resolución, el Superior asegura que el contenido de las pruebas se habría "mantenido igual de no haberse producido la infracción".