Grupos multinacionales han expresado al Ministerio de Defensa su interés por la gestión de la fábrica de armas coruñesa, para la que hasta ahora existían las propuestas de la firma coruñesa IFFE y de una corporación gallego-navarra que no ha hecho pública la suya. La entrada en juego de estos nuevos actores, desvelada ayer por los trabajadores tras reunirse con el conselleiro de Industria, puede modificar el proceso que se seguía hasta ahora para tratar de reiniciar la producción de la factoría, ya que el Estado-su propietario- tendría que convocar un concurso público si existe más de una oferta, lo que supondría además demorar la obtención de una solución al problema.

Los trabajadores desconocen por el momento la identidad de las nuevas empresas que intentan hacerse con las instalaciones, así como la fiabilidad de sus proyectos, por lo que reclamarán información sobre ambas cuestiones a Defensa y a General Dynamics en la reunión que mantendrán con sus responsables la próxima semana.

En ese encuentro participarán también representantes de la Xunta y el Ayuntamiento de A Coruña tras el acuerdo alcanzado ayer en la Consellería de Economía entre las tres partes, que decidieron establecer "una hoja de ruta" para las gestiones que llevarán a cabo en los próximos días. El objetivo es que tanto el Ministerio como General Dynamics "vean que la situación no puede seguir así", manifestó tras el encuentro el presidente del comité de empresa, Roberto Teijido, quien calificó de "positivo" el resultado de la reunión mantenida ayer.

El portavoz de los 61 empleados que fueron despedidos de la fábrica de armas tras negarse a acogerse a las bajas incentivadas recordó que llevan 8 meses de encierros parciales y totales ante la indefinición sobre el futuro del complejo industrial, por lo que es necesario resolver el problema cuanto antes. Las tres partes redactarán hoy el pacto alcanzado ayer después de cuatro horas de conversaciones, en el que plantearán que General Dynamics se comprometa a que la maquinaria de alta tecnología debe permanecer en A Coruña para garantizar la viabilidad de un nuevo proyecto empresarial.

El Instituto de Formación Financiera y Empresarial (IFFE), que gestiona una escuela de negocios en Oleiros, fue el primero en plantear una propuesta alternativa para la fábrica de armas, en la que se incluye la reincorporación de la antigua plantilla y la colaboración financiera de la Xunta a través del Igape para impulsar la actividad.

Esta iniciativa recibió en un primer momento el respaldo del Gobierno local y de los trabajadores, que posteriormente conocieron la intención de un grupo de inversores navarros y gallegos de desarrollar un proyecto en el que solo se emplearía capital privado y en el que los antiguos empleados se integrarían de forma "escalonada". Este proyecto comprende la creación de un Parque de Innovación en la zona de la fábrica en la que no se lleve a cabo actividad productiva.

Los trabajadores advierten de que cualquiera de las soluciones que se adopten deberán suponer la vuelta a sus puestos de los 61 despedidos y el mantenimiento en la fábrica de la maquinaria, que se considera imprescindible para la recuperación de la producción.