El temporal que puso en alerta roja ayer a la ciudad apenas se dejó notar toda la tarde y, al cierre de esta edición, no se habían producido grandes incidentes derivados del viento y la lluvia. Según las mediciones de MeteoGalicia, la ráfaga de viento más fuerte que se registró en el dique de abrigo -de la ciudad no había datos- fue de 95,1 kilómetros por hora. Una marca bastante alejada de los 131,3 kilómetros por hora registrados en Fragavella, en el concello lucense de Abadín.

La previsión meteorológica para hoy y mañana indica que el viento será de menor intensidad. Los servicios sanitarios de emergencias atendieron ayer a una persona que resultó herida al caérsele encima unos cascotes que se desprendieron de una vivienda de la avenida de Hércules, a la altura del bar La Garimbota, poco antes de las dos y media de la tarde.

El Gobierno local decidió ayer cerrar el acceso a las playas, parques, jardines por la previsión de fuertes rachas de viento, además del poblado lapón de María Pita. La Policía Local alertó de que durante todo el día el tráfico había sido lento en casi toda la ciudad, pero, sobre todo, en los accesos a los centros comerciales. En el polígono de A Grela, por detrás del McAuto, voló una plancha de un tejado y, a la altura del Carrefour, en Alfonso Molina, el viento tiró con un cartel publicitario.