El temporal "Nadja" ha pasado por A Coruña y se ha llevado una parte importante del paseo marítimo en una jornada en la que la alerta roja ha disminuido a naranja.

A Coruña y Lugo continuaban esta mañana en alerta roja -la máxima- por riesgo extremo de fenómenos costeros, según la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), que prevé para hoy en estas dos provincias olas de más de 8 metros.

También en Galicia está afectada por fenómenos costeros la provincia de Pontevedra, pero en este caso con un nivel naranja, donde el riesgo es importante pero no extremo, aunque la jornada ha ido a menos y la alerta en el litoral se ha quedado en naranja como mínimo hasta el martes.

Los daños en la ciudad herculina han sido muy importantes, en especial a lo largo de la noche, cuando el oleaje superó los diez metros de altura durante la pleamar y el agua llegó más lejos de lo previsto.

El tramo de paseo marítimo entre La Coraza -que separa las playas de Riazor y del Orzán- y el estadio de Riazor se ha visto superado por la fuerza del océano, pues por la mañana apenas quedaban los restos de lo que antes había sido la balaustrada.

El agua alcanzó la carretera, que amaneció llena de arena, al igual que la acera, donde los bancos que quedaban estaban a varios metros de su posición inicial mientras no se distinguía dónde empezaba el cemento y acababa la extensión de la playa.

Durante la mañana, estuvo cortado al tráfico el sentido más cercano a la costa y ahora todavía permanece cerrado el acceso a los peatones, que se agolpan en la zona para conseguir la mejor instantánea.

Una situación similar pasó en la otra costa de la ciudad a la altura de la calle Veramar -frente a la Escuela Pablo Picasso- donde unos cincuenta metros de barandilla están destrozados.

En Adormideras las vías se han despertado inundadas y el dique que protege toda la zona ha sido arrastrado por el mar, además de daños a varios coches y el trastorno que supone los vecinos el hecho de no poder salir de sus viviendas.

Fuentes municipales informaron de que el Aquarium Finisterrae, que también se ha visto afectado por el temporal, permanecerá cerrado durante todo el día mientras duran los arreglos.

Han advertido de los peligros existentes mientras ochenta personas trabajan para reparar todos los daños y que la situación vuelva a la normalidad aunque a las 18.30 horas, con la pleamar, podría darse otra situación de alto riesgo, aunque la alerta ha bajado.