Son proyectos que buscan estrategias para prevenir el cáncer a través de las matemáticas, analizar métodos para prevenir la contaminación del planeta o vías para una vida sostenible. Estas ideas parten desde la Universidade da Coruña, pero no logran seducir a las instituciones públicas para recibir subvenciones. Héctor Gómez, profesor en Ingeniería de Caminos, y Ricardo García Mira, de Psicología Social y Ambiental, vieron cómo sus objetos de estudios sí gozaron del reconocimiento de organismos europeos para sufragar sus trabajos.

El matemático recibió en junio de 2012 una beca del European Research Council dotada en 1,4 millones de euros. La subvención le permite configurar un equipo internacional de unos ocho miembros, que desarrollarán un proyecto que trata de predecir la evolución de los tumores de cada paciente a partir del uso de fórmulas matemáticas. "Sin la ayuda de los fondos europeos sería imposible llevar a cabo esta investigación", lamenta Gómez, que critica las partidas presupuestadas por los organismos españoles y su reparto "equivocado".

Ricardo García lideró en 2011 el primer proyecto europeo de la UDC tras recibir millón y medio de euros del séptimo programa marco de investigación y desarrollo de la Unión Europea. Este año repetirá responsabilidad con un estudio sobre métodos de vida sostenibles, con una partida de cinco millones.

El proyecto Locaw -Low Carbon At Work- supuso, en 2011, la primera investigación europea liderada por la Universidade da Coruña. El trabajo permitió analizar el impacto socioeconómico del cambio climático, uno de los retos planteados por la Unión Europea, que premió al equipo del profesor Ricardo García con una subvención de 1,5 millones de euros. "En un contexto de restricciones económicas del Estado y la Xunta, la ayuda supuso un balón de oxígeno muy importante para mantener a nuestra plantilla de investigadores y desarrollar el proyecto", admite.

El séptimo programa marco de investigación y desarrollo de la UE volvió a subvencionar con cinco millones de euros al investigador para el proyecto Glamour, que hasta 2017 averiguará métodos para alcanzar un estilo de vida sostenible. Esta nueva inversión permitió acoger en la Universidade a 35 investigadores de once centros europeos durante el mes pasado. "Es un espaldarazo, podremos mantener nuestra plantilla y contratar a seis más. En Europa hay una apuesta real por la investigación", añade.

García observa cómo las partidas europeas se han mantenido o, incluso, aumentado, mientras que en España le "sorprende" la reducción en los aportes a la investigación y el apoyo a las universidades. "Las convocatorias en Galicia solo van destinadas a empresas, cuando más del 80% de la investigación se genera en las universidades", expone el profesor, exigiendo que se refuerce el papel de estas.