Uno de los guardia civiles que registró el cadáver del menor declaró que portaba dos juegos de llaves -al menos uno era de la casa a la que accedió-, dos muñecos de playmobil, un pendiente de mujer y un par de guantes de látex, además de los que tenía puestos. "Llevaba un mazacote de llaves. Lo que más me llamó la atención fueron los guantes", testificó. Uno de los agentes destacó que estaban rotos y que coincidían con heridas defensivas. "Me hace pensar que en algún momento el chico sujetó la hoja del cuchillo", indicó, al tiempo que aseguró que el adolescente no llevaba "ningún objeto que pudiese ser usado como arma". En la vivienda de la víctima hallaron guantes de látex. "Es normal que los tuviese. En mi casa comemos las sardinas con guantes para no mancharnos", dijo la hermana del fallecido.