Los vecinos de la Ciudad Vieja se quejan de que, durante cuatro días, han tenido "graves" problemas de aparcamiento en el barrio, ya que la Policía Local puso unas señales "en algunas calles" advirtiendo de que, desde el sábado 19 a las cuatro de la tarde hasta el día 31 de julio, no se podría estacionar. En el resto de las calles, sin embargo, los agentes atrasaron la prohibición hasta el día de hoy, 22 de julio, ya que es cuando empieza la feria medieval -acaba el 27-.
La presidenta de la asociación de vecinos, Rosa Quiroga, asegura que ha atendido las quejas de muchos residentes que denuncian que, durante cuatro días, no tienen dónde dejar el coche. El aparcamiento alternativo que habilita el Ayuntamiento en la Hípica no empezó a funcionar hasta el día de ayer, dos después del cierre al tráfico, y se cerrará el 29, dos antes de que se vuelva permitir estacionar en el barrio.
"La gente estaba desesperada y fue muy molesto porque en unas calles dejaban aparcar y en otras no y no sabíamos las razones, además, no esperaron a que tuviésemos una solución de aparcamiento para cortar", explicaba ayer Rosa Quiroga, que le trasladó sus quejas al colectivo de comerciantes de la Ciudad Vieja. "En la Policía Local les dijeron [a los organizadores de la feria] que seguramente había sido un error, que tendrían que haber puesto todas las señales prohibiendo aparcar a partir del 21 o el 22", explicaba la presidenta vecinal. Este corte de las calles se debe a la celebración de la feria medieval, que cumple este año su vigésima edición. No es la primera vez que los vecinos tienen problemas con esta vuelta al pasado. Reivindican que la "apoteosis del consumo de la chilindrada", como la llamaron en un informe entregado a la edil de Cultura, Ana Fernández, se mude a la explanada del aparcamiento de la dársena o al entorno de la muralla para evitar convivir con ella.
