Los tres grupos de la oposición quieren que las dos empresas candidatas a gestionar la fábrica de armas, Hércules de Armamento y el grupo IFFE, pongan sus cartas sobre la mesa. Los grupos municipales de PSOE, BNG y Esquerda Unida-Os Verdes, que desde el miércoles de la pasada semana se han reunido por separado con los exempleados de la fábrica de armas vinculados a UGT, han coincidido en manifestar su interés en que ambas compañías expongan en María Pita los pormenores de sus proyectos industriales. También se reunió con los antiguos trabajadores el Partido Popular que, si bien solicitó a Defensa que se esclareciesen las "incertidumbres" del concurso, ha mantenido silencio con respecto a esta propuesta.

La adjudicación de la fábrica de armas está todavía en el aire aunque Hércules de Armamento es la que tiene más papeletas para llevarse la concesión, después de que la mesa de adjudicación le otorgase una mayor puntuación que al grupo IFFE. La adjudicación formal tendrá que comunicarla Defensa antes del 14 de octubre, si bien el Ministerio podría no dar nombres llegada esa fecha, teniendo así derecho las dos candidatas a retirar su proposición y a que se les devuelva la garantía que hubiesen prestado, según se recoge en el pliego.

La petición de la oposición llega después de que el presidente del antiguo comité, Roberto Teijido, haya sembrado durante las últimas semanas dudas sobre la "solvencia" de Hércules de Armamento a la hora de reactivar la vieja factoría. Ayer mismo, Teijido pidió un "frente común de Xunta y Concello" para analizar "si nos convence o no alguno de los proyectos" y pidió que no se aceptase nada "por imposiciones procedentes de Madrid".

El director del proyecto industrial de IFFE, Ricardo Blanco, confirmó ayer su intención de impugnar la adjudicación de la fábrica a Hércules de Armamento, en caso de que el Ministerio opte por darle a esta empresa la concesión. Blanco cree que hay motivos para "sospechar" de la ampliación de capital de 607.000 euros que realizó Hércules el pasado 12 de mayo, momento en que solo contaba con un capital social de 3.000 euros. El director de IFFE solicita que el Concello, la Xunta o UGT denuncien formalmente ante Hacienda a Hércules en caso de que piensen que detrás de la compañía "hay algún acto de contabilidad creativa".

A lo largo de las últimas semanas, Hércules de Armamento ha tachado de "falsas" estas acusaciones sobre una supuesta ampliación de capital irregular y aseguraron que el hecho de que los terrenos y la maquinaria sean de Defensa impediría que haya lugar "para hacer nada raro".