Beatriz Regueira y Laura González, respaldadas por defensores de los animales y miembros de la asociación animalista Libera, presentaron ayer en el Registro del Concello un escrito apoyado por 20.272 firmas con el que reclaman al Gobierno local que rescinda el contrato con la empresa Servigal por la comisión de "numerosas irregularidades" en la gestión de la perrera municipal.

Entre las anomalías que estas dos mujeres han descubierto en la instalación, a la que afirman que acuden a diario para controlar su actividad, está la falta de promoción de la adopción de mascotas, el incumplimiento del sacrificio animal como última opción, la inexistencia de un veterinario, la prohibición de ver determinados canes y el engaño de la empresa a los ciudadanos cuando estos quieren recuperar sus mascotas.

Las denunciantes instan también al Concello en el escrito a que imponga el sacrificio cero, promueva campañas de adopción y sea transparente en los registros de entrada y salida de animales.

Servigal negó ayer estas irregularidades y anunció que tramita las "acciones legales oportunas para poner freno a unas acusaciones que carecen de fundamento".