La conselleira de Traballo defiende que los mecanismos de control de su departamento son "correctos" y que fue "a principios del año 2012" cuando se detectaron irregularidades en los Programas de Integración de Empleo, cuya ejecución ha sido puesta en cuestión por la operación Zeta. La investigación del juzgado de Instrucción número 6 de A Coruña comenzó medio año antes de dichos controles y del sumario se desprende que el presunto cabecilla de la trama, Gerardo Crespo, militante del Partido Popular de A Coruña y que mantuvo durante años relación directa con altos cargos de la formación, se sorprendió cuando el Gobierno gallego hizo inspecciones con la operación judicial ya abierta. En el sumario consta una lista de subvenciones, tanto del bipartito como del Gobierno de Núñez Feijóo, por unos 15 millones de euros, entre 2005 y 2012. "No es una buena noticia para un gobierno el haber descubierto un fraude de fondos públicos", declaró Mato, que argumenta que fue su Ejecutivo el que implantó los mecanismos de control. El exdirector xeral de Traballo Odilo Martiñá dimitió en septiembre tras declarar ante la policía en el marco de la investigación. La conselleira dijo que fue "una decisión personal" que Martiñá le explicó "personalmente", para "centrarse en su defensa".
