El antiguo comité de empresa de la fábrica de armas -vinculado a UGT- presentará el 2 de enero, ante la Delegación del Gobierno, un recurso de reposición contra la decisión del Ministerio de Defensa de archivar la denuncia que habían presentado una parte de los despedidos de Santa Bárbara contra la adjudicación de las instalaciones de la factoría a la empresa Hércules de Armamento. El acto será a las 12.00 horas y los extrabajadores se concentrarán ante el edificio para exigir que, esta vez, sus demandas sean escuchadas.

Los extrabajadores habían alertado de presuntas irregularidades en la solvencia de la firma y, siempre sospecharon que la adjudicación del contrato "estaba amañada". Entre las irregularidades que apuntaban los extrabajadores de la fábrica estaba un posible fraude fiscal y un incumplimiento de las obligaciones tributarias de la adjudicataria.

Los trabajadores habían pedido que se investigase a los socios capitalistas que respaldan el proyecto de Hércules de Armamento, porque habían detectado una ampliación de capital de 607.000 euros desarrollada en el mes de mayo, cuando solo contaban con 3.000 euros de capital. En octubre, el antiguo comité de empresa de la fábrica de armas solicitó también que se comprobase que la adjudicataria había abonado, al menos 100.000 euros en concepto de IVA, porque creía que no lo había hecho.

En caso de que las sospechas de los trabajadores fuesen ciertas, Hércules de Armamento no podría haberse presentado al concurso público. La adjudicataria, entonces, se defendía diciendo que había pasado los filtros del Ministerio y que había ganado el concurso legalmente. Ahora, el antiguo comité de empresa recurre la decisión de Defensa de no investigar lo que los trabajadores le pedían, con la intención de que su demanda sea admitida y las pesquisas sigan adelante.

La empresa que perdió el concurso de la fábrica de armas, el grupo IFFE señaló ya en noviembre que tenía en mente recurrir la adjudicación a Hércules de Armamento. Los 61 trabajadores que se mantuvieron en las instalaciones de la fábrica de armas para evitar su desmantelamiento apoyaban el proyecto presentado por IFFE y el grupo les había garantizado que, de ganar, recuperarían sus empleos. Hércules de Armamento, sin embargo, dijo que partía "de cero" y que no habría ni privilegios ni restricciones en la contratación.