La Compañía de Tranvías celebra hoy sus elecciones sindicales con la negociación del nuevo convenio en el horizonte y con la seguridad de los chóferes y la tarjeta Millennium en la libreta de los deberes que corregir, aunque no sea a los trabajadores a los que les competa esta materia. Unos 250 empleados de la empresa están llamados a votar durante la jornada de hoy a alguna de las cuatro listas que se presentan, las de UGT, CIG, Comisiones Obreras y la del sindicato independiente Grupo de Trabajadores de Tranvías (GTT).

El responsable de Transportes de la CIG, Ernesto López, apunta a que no sean los conductores de las líneas "los que tengan que dar la cara" cuando las tarjetas Millennium no funcionen. No propone alternativas, lo deja en manos de la empresa y del Concello, así como la seguridad de los chóferes, tras la agresión que sufrió un compañero y en la que perdió la visión de un ojo. "La empresa se tiene que mojar en temas como la seguridad y también en el de las condiciones en las que conducen los trabajadores. No hay climatizadores ni aire acondicionado en todos los autobuses y ya hubo casos de desmayos de conductores por el calor", explica López, que reclama al Concello que haya líneas con más autobuses.

"Hay itinerarios muy ajustados de tiempo y se le mete prisa al conductor para poder cumplir los horarios establecidos", denuncia López, que critica también la política de sanciones de la empresa. "Multan a los conductores por tener pequeños golpes y eso les hace ir más nerviosos y cometer errores", asegura el portavoz de la CIG.

El candidato de Comisiones Obreras, Alberto Lorenzo, apuesta por hacer más cómodo el trabajo de los conductores ampliando un par de minutos las frecuencias de buses con trayectos largos, como el 1 y el 2 A. Tenemos unos horarios muy ajustados, algunas veces, por el roce entre dos coches, ya pierdes dos o tres minutos y eso ya te hace llegar tarde a la parada", explica. "Nosotros lo que planteamos es adecuar los horarios al tráfico", comenta el candidato de Comisiones.

El sindicato independiente GTT reclama la unidad de los trabajadores y demanda también una solución para el mal funcionamiento de las tarjetas Millennium, ya que asegura que "ralentiza" el servicio que le dan a los usuarios. Aboga por solucionar los problemas de tráfico de los que adolece la ciudad, como la doble fila o los turismos que estacionan en las paradas de los autobuses, impidiendo que puedan desplegar la rampa que facilita el acceso a las personas con movilidad reducida, según explica Roberto Castro, uno de los portavoces de la formación. Piden también baños públicos en las cabeceras.

El cabeza de lista de UGT, Miguel Campos, declinó la invitación de este diario de hacer declaraciones sobre las reivindicaciones que plantea su sindicato en la Compañía de Tranvías antes de que se celebrasen las elecciones.

La lista más votada en los anteriores comicios fue la de GTT, aunque actualmente sus miembros no presidían el comité de empresa por la coalición de los sindicatos UGT, CCOO y CIG.