El BNG, que ayer desveló el contrato "a dedo" para que una empresa planifique la reducción de la vivienda protegida, manifestó ayer que los grandes promotores "deben estar contentísimos y celebrando por todo lo alto la rebaja que va a hacer el señor Negreira". Para los nacionalistas, esta decisión va a afectar al precio de la vivienda libre, "ya que si mengua la oferta de la vivienda protegida lo más previsible es que aumente el precio de la vivienda libre y que se acrecienten sus beneficios". Para el BNG, la determinación del Gobierno local muestra "un total abandono por la intervención y regulación del mercado del suelo y de la vivienda".

El grupo municipal del PSOE se sumó ayer a estas críticas y exige que se cumpla la ley estatal a la hora de modificar estos porcentajes. Indica que hay márgenes y que en Oleiros, pudiendo reducir la reserva al 3,42% se dejó en un 10%" para "evitar ilegalidades en las que se podría estar incurriendo en el caso de A Coruña", ya que, recuerdan, hay recursos ante el Constitucional en este sentido. Para los socialistas no es suficiente que estos porcentajes se realicen en un acuerdo plenario, sino que hay que realizar una modificación puntual del documento que se exponga públicamente y se someta a un periodo de alegaciones.