El magistrado del Juzgado de lo Penal número 3 de A Coruña decretó la absolución de dos acusados de atracar un banco el 29 de diciembre de 2007 en las inmediaciones de la plaza de Lugo. El juez arguye en la sentencia que los testigos de los hechos fueron incapaces de identificar a los autores "sin ninguna duda" en las ruedas de reconocimiento. Tampoco lo hicieron durante la vista oral. "Concurren, pues, razonables dudas sobre la autoría de los acusados", destaca, al tiempo que señala que procede absolver a los imputados "en virtud del principio in dubio pro reo", que se aplica cuando "no se desvirtúa" la presunción de inocencia de los sospechosos.

El representante del Ministerio público reclamaba que los procesados fuesen condenados a cinco años de prisión, ya que los consideraba autores del asalto sucedido en 2007 sobre las 12.55 horas en una sucursal situada en la calle Ferrol, al lado del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG). Dos personas accedieron a las instalaciones armados con pistolas. Además, llevaban pelucas para dificultar su identificación. Uno de ellos se cubrió parte del rostro con una barba postiza. Los atracadores amedrentaron a los empleados y obligaron a la interventora de la sucursal a que les facilitara la clave de acceso a la caja fuerte. Así, consiguieron apoderarse de 65.281 euros.

Una vez que se hicieron con el botín, obligaron a los tres trabajadores de la sucursal y a un cliente a introducirse en el interior de una habitación destinada a archivo, donde los encerraron con llave. Transcurridos unos 15 minutos consiguieron salir tras manipular el pestillo interno.

La Fiscalía, además de cinco años de cárcel para cada uno de los sospechosos, reclamaba en su escrito de calificación que pagasen una indemnización de 65.281 euros a los propietarios de la sucursal bancaria.