El Gobierno central continúa dando largas sobre el futuro de la estación intermodal de San Cristóbal. El Ministerio de Fomento sigue sin dar plazos para el inicio de las obras e insiste, como ya lo hacía en febrero, en la tesis de que trabaja con el resto de administraciones públicas para coordinar la futura construcción.

En respuesta a una pregunta introducida por el exalcalde y senador socialista, Javier Losada, la administración central aseguró el 26 de mayo que trabaja en un acuerdo con el Concello para definir las actuaciones de manera que sean "económicamente viables" y se asegure "un adecuado servicio a los usuarios".

El discurso es el mismo, aunque algo más concreto, que mantenía en febrero, cuando afirmaba que Adif estaba estableciendo el desarrollo de los trabajos "en coordinación con el resto de administraciones implicadas" como paso previo para la licitación de las obras. Dos meses antes, volvía a contestar de la misma manera: "Fomento está trabajando para definir las actuaciones a desarrollar en el futuro".

Un año antes, desde Madrid condicionaban la licitación de los trabajos a la entrada de la Xunta en el convenio de desarrollo de la estación, cuestión de la que se desconocen avances.

El Gobierno central, que pretende que la intermodal esté operativa en tres años, prevé desarrollar el proyecto por fases, centrándose la primera en la reforma de la actual estación de ferrocarril, cuyo nuevo diseño tuvo que ser reformulado para rebajar los costes del proyecto inicial.

De la estación de autobuses poco se sabe. Por el momento, la última novedad es que se ubicará, según los planes de la Xunta, a media altura entre los andenes de la actual terminal de ferrocarril y la avenida de A Sardiñeira, a modo de transición entre ambas cotas. Así se recogía en las condiciones del estudio para determinar las necesidades de integración de ambas estaciones que sacó a concurso el Gobierno gallego el pasado mes de marzo.

El diseño inicial elaborado conjuntamente entre el arquitecto César Portela y la empresa de ingeniería IDOM International, a los que el Ministerio de Fomento adjudicó el diseño de la intermodal, es el objeto de estudio de este trabajo con el que se pretenden determinar cuestiones como la capacidad mínima de la terminal de bus en lo que a número de dársenas se refiere, sus dimensiones o los servicios prestados.

Aquel primer proyecto de la intermodal de San Cristóbal contaba con un presupuesto de 180 millones de euros pero Fomento decidió reconfigurarlo para abaratarlo. El plan inicial del Gobierno para financiar la infraestructura era vender los 37.000 euros de la estación de buses de A Cubela y algunas parcelas próximas a San Cristóbal. Hasta el momento, solo había habido noticias del rediseño de la terminal de trenes, competencia de Fomento.