El alcalde, Xulio Ferreiro, y la portavoz socialista, Mar Barcón, se reunieron ayer, una vez más, para hablar de los temas importantes que estarán sobre la mesa durante los próximos cuatro años. Esta charla se produjo después de que la socialista -tras apoyar la investidura de Ferreiro- asegurase que en estos primeros días Marea Atlántica no había hecho nada diferente a lo ejecutado por el anterior regidor municipal, Carlos Negreira. Ponía una salvedad, que el que es ahora líder de la oposición tenía entonces mayoría absoluta y tenía más libertad para tomar decisiones, la que le daban sus catorce concejales, frente a los diez de la Marea.

En una entrevista a LA OPINIÓN, Barcón reconoció que esperaba que la oposición estuviese representada en los órganos de las empresas municipales. "En este tiempo de diálogo y de acuerdos, y en un momento de ausencia de mayorías, es obvio que habrá una representación más plural de la que hubo en los pasados cuatro años", dijo Barcón, que le afeó al regidor municipal que no hubiese compartido con la oposición los temas de la Junta de Gobierno, algo que le había producido "sorpresa", el mismo término que usó ayer Ferreiro para hablar de la reacción que le habían producido las declaraciones de la socialista.

"En el mejor de los casos será una confusión, estoy bastante sorprendido por esas declaraciones porque no es solo que llevásemos en nuestro programa electoral la intención de incorporar a todos los grupos municipales a los órganos colegiados, incluyendo las empresas públicas, sino que ya hicimos traslado de esa propuesta el 8 de junio al partido socialista. Si el PSOE quiere cuestiones diferentes tendríamos que verlo", declaró ayer Xulio Ferreiro, que se mostraba abierto a "aclarar el malentendido" y a mantener una "comunicación fluida" con todos los grupos de la oposición.

"El Gobierno local es el competente para designar esos órganos y si aún no los designamos y llevamos retraso es porque estamos esperando a esa negociación y a hacerlo con el consenso de todos los grupos, por lo que creo que ciertas diferencias de estilo sí que hay", puntualizó Ferreiro, ya que durante la pasada legislatura solo los miembros del PP estaban sentados en los consejos de las empresas públicas, como la de aguas, Emalcsa, y la de vivienda, Emvsa.

Barcón, que aseguró que su grupo apoyaba la investidura de Xulio Ferreiro sin esperar nada a cambio, dijo ayer que las palabras "diálogo y acuerdo" deben ser los "nuevos ejes de la política en la ciudad" y que eso se tiene que traducir en la "actitud de todas las fuerzas políticas, incluida la Marea Atlántica". Barcón apuntó que había ido a la reunión para "ajustar un marco de acuerdos" y para trasladarle a Xulio Ferreiro "la necesidad de compartir y conocer previamente algunas decisiones que requieren mayoría absoluta". Sobre las empresas municipales y la presencia de la oposición en sus órganos, Barcón había dicho a este diario: "No se trata de pedir, porque no es una cosa graciable, no le pedimos nada a nadie, solo el voto al ciudadano. Entendemos que la manera de gobernar la ciudad ha de ser desde el acuerdo, el diálogo y el consenso de las fuerzas que facilitaron el cambio, de todas las fuerzas políticas, dada la pluralidad y la distribución. No se trata de pedir sino de que el Gobierno y las decisiones tienen que reflejar una realidad".

Marea Atlántica defiende que el PSOE no quiso formar parte del Gobierno local y que apoyó la investidura de Ferreiro, por lo que "diálogo habrá en todo momento" aunque eso no vaya a significar que el Gobierno local vaya a actuar bajo demanda del PSOE.

Barcón anunció que su labor estos cuatro años será de "control férreo" del Gobierno local. Desde la toma de posesión, los socialistas cargaron contra Ferreiro por considerar que sus formas son iguales a las de Negreira, criticaron que no se aplicase su medida para dar de comer a los niños con beca de comedor en verano -aunque la Marea puso en marcha otra diferente también de ayuda a las familias con necesidades- y le afearon a Marea Atlántica que hubiese defendido al ahora exedil de Cultura de Madrid, Guillermo Zapata, por unos tuits de humor negro que, finalmente, le costaron el cargo.

Barcón adelantó ayer que mantendrá "reuniones periódicas" con Marea y que ambos grupos "seguirán hablando todos estos días".