La rotura de una tubería de agua a la altura del número 38 de la calle Monasterio de Caaveiro a las 03.00 horas de ayer dejó sin servicio a trescientas viviendas de ocho portales de la vía del Ventorrillo. En siete de ellos se pudo restablecer el suministro, si bien con menor presión, a partir de las 09.00 horas, pero el portal 40, el más afectado, quedó sin agua hasta que a las 12.00 horas Emalcsa terminó la reparación, cambió un tramo de seis o siete metros y restableció el abastecimiento.

Según la empresa municipal de aguas, la rotura no se debió a la acción humana o, como se pensó en un primer momento, a las raíces de un árbol cercano, sino al desgaste por la presión por o las temperaturas del verano. Aunque la empresa no pudo precisar cuánto tiempo llevaba instalada la tubería rota, sí que señaló que las de la red general, de mayor tamaño, tienen una vida de cincuenta años, que sobrepasa la instalación de la red en esta zona, y por ello descarta que la avería se haya debido a la edad.