Trabajadores de la empresa municipal dedicada al mantenimiento de los semáforos de la ciudad denuncian despidos en el seno de la concesionaria y advierten de que, como consecuencia, la calidad del servicio puede quedar mermada. Una representación se reunió ayer con el concejal de Mobilidade Sostible, Daniel Díaz, que se comprometió a analizar la situación.

El conflicto laboral no es nuevo y ha acabado en los juzgados. El problema se inició en 2014 con el cambio de concesionaria, cuando la misma plantilla denunció que la unión de empresas elegida por el Concello, Telvent-Aluvisa, se negaba a subrogar a los 19 trabajadores que tenía contratados la anterior firma. El personal les acusa, al igual que entonces, de incumplir esta condición del contrato con el Ayuntamiento y con la que ganaron el concurso.

A lo largo de este año, informan los trabajadores, la UTE concesionaria despidió a cuatro trabajadores, a lo que se añade un acuerdo de baja. La situación se agravó el pasado jueves, cuando se notificó el despido a otras dos personas. Y creen que no parará ahí.

Los trabajadores rechazan los argumentos legales de la firma para proceder a dar de baja de la plantilla a sus compañeros, tal y como explican sus representantes laborales. Según comentan, la adjudicataria del servicio argumenta que, una vez cumplidas con las mejoras tecnológicas incluidas en el pliego, no es rentable mantener a toda la plantilla. Una justificación económica que no está amparada legalmente, opina el personal, la cual avanza que todos los despidos serán evaluados por un juez.

Las demandas de los dos últimos ceses irán, no solo contra la empresa, sino también contra el Ayuntamiento, como responsable subsidiario, ya que este "debe velar por la estabilidad de la plantilla". Roberto García, de Comisiones Obreras, relata que los beneficios de la empresa se nutren tanto del contrato como de la pequeñas inversiones que el Concello le va encargando eventualmente.

García concluye que, si se despide a más gente, solo habrá una persona por turno para realizar las labores de mantenimiento preventivo, también para atender las incidencias y averías que se puedan presentar. Hay tres sentencias pendientes de juicio y se presentarán dos más por los nuevos despidos. A ello se suma una sentencia favorable a un trabajador después de un traslado.