Marea Atlántica reclama a la Diputación que el dinero que le correspondería a sus representantes por dietas y la parte del salario al que renuncia uno de sus diputados sea destinado a "algún gasto o inversión social".

Dos diputadas de Marea en la Administración provincial -Claudia Delso y Rocío Fraga, que perciben sueldo del Concello- renunciaron a cobrar por asistir a plenos, comisiones y mesas de contratación. Daniel Díaz, que tiene dedicación exclusiva en la Diputación, renunció a 15.000 euros de su sueldo, ya que el código ético de su formación le impide ingresar más de 35.000 euros al año, que es la cantidad que cobran Delso y Fraga del Ayuntamiento.