La planta de Nostián recibió en 2014 un total de 173.000 toneladas de residuos urbanos, procedentes del término municipal de A Coruña y de los concellos del Consorcio As Mariñas, menos Sada. Abegondo, Arteixo, Bergondo, Betanzos, Cambre, Carral, Culleredo y Oleiros generaron, en conjunto, el 42% de los residuos que trató Nostián. El porcentaje restante, unas 100.000 toneladas, fueron producidas únicamente en el ayuntamiento coruñés.

El reciclaje alcanzó en el último año al 44% de toda la basura que llegó a Nostián, una cifra casi dos puntos superior a la de 2013, aunque lejos del 65% que la empresa Albada se comprometió a reciclar cuando logró la concesión, en el año 2000. El resto de los residuos son rechazos, es decir, basura no recuperable, que es enviada a otros vertederos desde 2008, cuando se llenaron los tres vasos del depósito de Nostián. Recientemente, la Xunta ha exigido al Concello el sellado de los dos vasos que faltan, obra que tendrá que ser acometida en el plazo de un año.

A lo largo del año, la planta produjo un total de 17.500 toneladas de compost, aunque solamente tres toneladas fueron aprovechadas luego por particulares y empresas.

Del total de 173.000 toneladas que entraron en 2014 en Nostián, la basura orgánica supuso unas 120.000 toneladas, el 69% de todos los materiales que llegaron a la planta. Los residuos orgánicos producidos en la comarca rondaron las 33.000 toneladas, alrededor del 19% del total. Orgánicos e inorgánicos en conjunto se acercan al 90% de todas las basuras que producen A Coruña y los ocho concellos del Consorcio As Mariñas.

La separación de origen es deficiente, ya que, según la memoria del departamento de Medio Ambiente de A Coruña, en los contenedores inorgánicos se recoge, de media, un 34% de materia orgánica. Precisamente la materia orgánica supone, en los contenedores reservados para ella, un 78% del total registrado.

El conjunto de la comarca también generó en el pasado ejercicio unas 7.000 toneladas de papel y cartón, 5.800 de vidrio, 1.100 de madera y 300 de plásticos, entre otros materiales de menor entidad, como aparatos eléctricos y electrónicos (158,32 toneladas), envases plásticos (114,14) o pilas (14,76). La recuperación de las pilas, que según Medio Ambiente tiene en la planta coruñesa la ratio más alta de Galicia, supuso en el último año un ingreso de casi 12.300 euros a través de Ofipilas, que se encarga de la gestión de estos materiales.

Los envases recuperados, que en 2014 se incrementaron en un 1,25%, implicaron ingresos por importe de 2,33 millones de euros a través de la sociedad Ecoembes, participada por productores de embalajes, que paga a los ayuntamientos españoles según la cantidad de envases que reciclan.

En cuanto al vidrio recuperado, Medio Ambiente señala en su memoria que éste se ha estabilizado en cifras similares a las de los últimos años. El Ayuntamiento concluye de estos datos que es necesario un mayor esfuerzo en la separación de origen, especialmente en el ámbito de la hostelería. Ecovidrio, la entidad encargada de la gestión del reciclado de este material, pagó 87.000 euros por la recuperación de estos envases.

El departamento de Medio Ambiente se muestra satisfecho de que la utilización de los puntos limpios por los coruñeses haya superado los datos de años anteriores. El total de toneladas entregadas fue superior a las 6.000, una cifra que la empresa relaciona con la creación del punto limpio móvil, que se encuentra cada día, de martes a sábado, en una calle diferente de la ciudad.

La importancia de los dos puntos limpios fijos, situados en Os Rosales y Eirís, es que reciben residuos de tipo voluminoso -1.400 tonleadas en 2014- que no pueden ser entregados en otros contenedores, como electrodomésticos o mobiliario doméstico. Los puntos limpios también recogen otros materiales del tipo de aceites, pinturas y barnices, neumáticos y baterías de coche.

Medio Ambiente celebra en su memoria que el incremento de la cantidad de residuos que entraron en Nostián el año pasado haya permitido reducir el canon que paga el Ayuntamiento. Frente a las 173.000 toneladas de 2014, el año anterior la planta había recibido 150.000. El motivo, la huelga en las instalaciones, que obligó a desviar parte de las basuras a Sogama, y las tiranteces con los concellos del Consorcio, que incluso amenazaron con dejar la planta de Nostián por la de Cerceda, descontentos con el servicio de Albada y el canon que tenían que pagar.

En 2014 se efectuaron dos grandes campañas municipales de concienciación para el reciclaje. La campaña Coru...ñam!, que tenía como objetivo aprovechar los alimentos y evitar convertirlos en desperdicios, contó con la colaboración de 30 establecimientos y evitó que se perdiesen 800 kilos de comida. A finales de 2014 otra campaña, Vidrio por Castañas, animó al reciclaje de vidrio entregando cucuruchos de castañas a los vecinos a cambio de un kilo de envases de este material.