El Gobierno local marca en el calendario de 2016 la licitación del medio centenar de puestos vacíos que hay en los mercados municipales. Prevé sacarlos a concurso a principios de año y cambiar previamente también la ordenanza que regula la actividad en la red de plazas para que la adjudicación tenga en cuenta el proyecto y la diversidad más que la oferta económica, para conseguir que los mercados ofrezcan nuevas propuestas.

Para la reformulación de la normativa, el concejal de Emprego e Economía Social, Alberto Lema, avanzó ayer que tendrá en "muy cuenta" todas las aportaciones que hagan los profesionales que trabajan en los mercados.

Lema puso ayer el foco en que las plazas pueden ser una salida laboral para personas que no cuentan con facilidades para acceder a un puesto de trabajo y considera que, entre los criterios que deben pesar más que el económico, debe estar el social, así como el de ofrecer un comercio de proximidad, que los productores puedan vender su género en los mercados, así como la potenciación de los productos ecológicos. La ordenanza está ya "avanzada", explicó Lema, aunque tendrá que ser consensuada y completada con las demandas de los comerciantes de las plazas.

El mercado que más puestos vacíos tiene en la actualidad es "el de San Agustín", con casi una veintena de vacantes, según comentó el edil. "Un mercado es un ente complejo que gana en atractivo cuanta más actividad tiene", recalcó Lema, que cargó contra la falta de "interés" del anterior Gobierno local por los mercados por no haber licitado los puestos. Lema atacó también a la Xunta por haber cancelado en dos ocasiones su reunión para hablar de la reforma de Santa Lucía.