El colectivo In Nave Civitas recuperará la figura de Juan Díaz Porlier el 3 de octubre. Volverá al Campo da Leña, al lugar en el que fue ahorcado y condenado al olvido por intentar restaurar, en 1815 la Constitución de Cádiz.

Cuenta Teresa Ramiro, del colectivo organizador, que es una manera de darle a conocer a la ciudad su historia, de forma lúdica, con música, con teatro y hasta con comida, ya que habrá una pequeña fiesta, a última hora de la mañana del 3 de octubre en el Campo da Leña. Aunque el programa no está todavía cerrado, In Nave Civitas ya sabe que será Moncho do Orzán el encargado de narrar la historia de este héroe liberal con destino trágico, pagando con la horca sus ansias de cambiar su ciudad para cambiar el mundo. Lo hará a modo de cantar de cego, recitando la vida de Porlier y estará acompañado por el también músico Xurxo Souto.

Tras la representación en el Campo da Leña, la comitiva de Porlier partirá hasta Ordes, para comer en Mesón de Deus, donde el mariscal fue retenido cuando iba camino de Santiago, con el triunfo en A Coruña y Ferrol ya a cuestas. Tenía 27 años y había trazado en Pastoriza y durante su encierro en el castillo de San Antón -a donde le habían llevado después de ser detenido en Madrid- un plan para volver a instaurar el régimen liberal.

El relato de aquel septiembre de 1815 es sabido como uno de los capítulos históricos más importantes de la ciudad. Juan Díaz Porlier dio un golpe de mano en Pastoriza y dirigió un levantamiento, tras triunfar en A Coruña y Ferrol trasladó al Concello coruñés tres exigencias básicas: que hiciese pública la proclama de restauración del régimen liberal, "dos mil raciones de carne" para las tropas sublevadas y muestras oficiales de alegría con luces y repique de campanas.

Su victoria se truncó al ser apresado y sometido a un juicio sumarísimo. Entonces, fue ahorcado. Durante el Trienio Liberal (1820-1823), la ciudad -que no había olvidado que se había sentido vencedora gracias a Porlier-, recuperó las cenizas y, el 4 de mayo de 1920, vecinos -muchos liberales, como el finado mariscal- quemaron en el Campo da Leña una reproducción de la horca que había segado la vida del sublevado. "Por la libertad santa en él ha dado el heroico Porlier su último aliento", llegó a decir una niña de las que asistió al cortejo de reparación, según recoge la prensa de la época.

La ciudad le recordó y volverá a hacerlo el 3 de octubre, aunque doscientos años después de su muerte, nadie sabe dónde descansan los restos de Porlier. La prensa local recogió en noviembre de 1947 que se habían hallado restos humanos mientras se realizaban los trabajos de desmonte del terreno de la capilla de San Roque, que fue derruida ese año, y se especulaba con que perteneciesen a Porlier. La documentación, sin embargo, deja testamento de que el destino del fallecido pudo ser otro.

Si bien sus cenizas fueron trasladadas a la capilla de San Roque, un libro de actos condena al olvido al mariscal, según recoge la publicación El cementerio de San Amaro: memoria de dos siglos. "Ofíciese al señor Juez Eclesiástico para que las órdenes oportunas para que las cenizas de Porlier que se hallan en la capilla de San Roque sean trasladadas al Cementerio General (San Amaro), deshaciéndose de cualesquiera monumento o epitafio que recuerde a su memoria", dice el documento. A partir de ahí, es una incógnita el paradero de los restos de Porlier.

Los organizadores del acto apuntan a que la comida en Mesón de Deus está abierta a los que quieran asistir. El precio del menú será de 20 euros y tendrá como plato principal el cocido. La reunión estará amenizada por Xurxo Souto y Moncho do Orzán, que llevarán sus instrumentos a este encuentro.