El patrón mayor de A Coruña, Felipe Canosa, confirmó ayer que el furtivismo se había reducido en la ciudad después del cambio del Código Penal que tipifica esta acción como un delito. "La gente se lo piensa más y ya hay varias personas imputadas por esta actividad", explicó ayer Canosa, que asistió a la reunión que se celebró en la ciudad para analizar el impacto del furtivismo en la zona.

El presidente de la federación de pósitos, Tomás Fajardo, que también asistió a esta mesa de trabajo, señaló como uno de los puntos más relevantes la disposición de la Policía Local a unirse a la lucha contra el furtivismo "dentro de su ámbito de actuación". Fajardo explicó que el compromiso del 092 reside en intervenir en la identificación de las personas que venden productos extraídos ilegalmente así como en intervenir en los lugares en los que sean requeridos.

Fue la novena y última mesa del furtivismo, un encuentro en el que participaron, además de los representantes de las cofradías de la zona, miembros de la Xunta, de los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado -Guardia Civil, Policía Local, Autonómica y Nacional-, entre ellos, el subdirector general de Guardacostas, Lino Sexto.

Canosa comentó ayer que, para combatir "la lacra" del furtivismo, se han incrementado los medios que se destinan a este fin, como la contratación de vigilantes guardapescas. Compartieron también los integrantes de la mesa, sus experiencias en otros estuarios y se habló de la formación de los guardapescas de los pósitos.