Un año de prisión, que no cumplirá porque carece de antecedentes, y el pago de una multa de 1.620 euros. Esa es la pena a la que aceptó ser condenada una mujer que reconoció haber cometido un delito de denuncia falsa y otro de estafa. La imputada se presentó en dependencias policiales el 17 de enero de 2012 y relató a los agentes que, el día anterior, sobre las 20.00, le habían robado en el aparcamiento del centro comercial de Cuatro Caminos una bolsa con unas joyas que acababa de comprar por valor de 550 euros. La procesada presentó la denuncia a sabiendas de que había extraviado los objetos y con la intención de ser indemnizada por una compañía aseguradora, con la que tenía un contrato que le cubría el riesgo de robo fuera del hogar familiar. La mujer llegó a describir al supuesto ladrón como "un hombre de 30 años, 1,70 de estatura y tez morena" y aseguró que lo reconocería si lo detuviesen. La Policía Nacional investigó los hechos y recuperó las joyas que había perdido, por lo que la condenada reconoció que se había inventado el robo.