El conselleiro de Economía e Industria, Francisco Conde, exigió ayer a la empresa concesionaria de la fábrica de armas, Hércules de Armamento, que "concrete" su proyecto para el complejo industrial, del que poco ha trascendido desde que se hizo con la gestión de las instalaciones. "La empresa tiene que dar respuesta a los compromisos de la licitación", manifestó el conselleiro.

El proyecto que resultó ganador del concurso, liderado por el empresario Ramón Mejuto, había prometido en una rueda de prensa del 7 de octubre de 2014 la contratación en el plazo de un año de un total de 155 empleados y la inversión durante todo 2015 de un total de 1,59 millones de euros.

En mayo, fuentes de la compañía, con la que este diario no se logró poner en contacto ayer pese a intentarlo, afirmaban que trabajaban en la planta un total de 33 empleados, además de otros 15 guardias jurado. La previsión por aquel entonces era la de comenzar la producción de armas de fuego a partir de junio, aunque por el momento nada se ha sabido. También en mayo, Defensa aseguraba que la concesionaria había cumplido hasta el momento con las obligaciones fijadas por el concurso.

Los extrabajadores de la fábrica vinculados a UGT, sin embargo, continúan denunciando la falta de actividad en la fábrica y acusan a la empresa de haber cometido un delito de fraude fiscal, por lo que piden la investigación de Hacienda.