La Marea Atlántica ha celebrado esta tarde sus cien días de gobierno en A Coruña con un acto público para rendir cuentas ante la ciudadanía, un gesto que ha considerado una "victoria histórica" de los coruñeses que "es una buena noticia para la democracia y nunca debimos consentir que fuera de otra manera".

"25 medidas en cien días para el 99%" de los ciudadanos es el lema bajo el que se ha celebrado este acto, en el Paraninfo de la Universidad de A Coruña, en el que los diez ediles de la Marea han hablado del cumplimiento de las 25 medidas urgentes que han promovido desde su investidura como nuevo gobierno el 13 de junio.

Hace algo más de un año que nació esta candidatura ciudadana con el fin de "devolver" el palacio de María Pita a los coruñeses y, desde que traspasó sus puertas, estos cien días han estado "llenos de actividad, de problemas y de ilusiones", con medidas programáticas y otras nuevas, asuntos del día a día y de urgencia, algunos temas mediáticos y otros más silenciosos.

Entre ellos figuran auditar y renegociar la deuda del Ayuntamiento y apostar por la banca ética; transparencia en la contratación; activar el Consejo Social Municipal; un escaño ciudadano en el pleno; rebajar los costes del gobierno un 50%; publicar la declaración de bienes de sus miembros; negarse a colaborar en los desahucios o crear una Renta Social Municipal.

"Los vecinos de A Coruña van a gobernar la ciudad", auguraba entonces el líder de este movimiento, Xulio Ferreiro, porque creía en la Marea y "vaya si había Marea", ha destacado hoy ante un auditorio que ha tomado también la palabra para hablar del escaño ciudadano, de desahucios, de vivienda y de política social, o de medioambiente.

En ese tiempo, estos primeros cien días de gobierno, Ferreiro ha querido "celebrar" lo conseguido pero además "rendir cuentas", que "es ya una victoria histórica" de los ciudadanos porque "lo más importante era cambiar la forma de hacer las cosas" y, para ello, ha reclamado la iniciativa, la lupa, la responsabilidad, el "hambre de política" de los coruñeses.

"Rendir cuentas es ya una victoria histórica", ha reiterado, y lo es porque el alcalde anterior, el popular Carlos Negreira, estaba "ausente" y "no iba a los debates, no daba explicaciones", y porque los gobiernos precedentes "nunca confrontaron su actuación con la gente más allá que cuando tocaba, cada cuatro años", sin "la más mínima intención de cumplir su programa electoral", ha detallado.

Que hoy haya "la exigencia de que nosotros sí lo cumplamos, eso es una victoria", ha abundado.

Ferreiro ha dicho que pese a liderar un gobierno "sin experiencia" trabajan mucho y con ilusión, como ayer en la nueva Praza das Atochas, con "frustraciones" también, porque "parte de la Corporación no habla nuestro idioma ni tiene la intención" de hacerlo, y con transparencia, abriendo "puertas y ventanas" y facilitando la participación en todos los procedimientos.

Entre las dificultades propias se encuentran las "pocas manos" y la "inexperiencia", y entre las ajenas la "deslealtad institucional" y los "palos en las ruedas que algunos nos ponen", ha ejemplificado.

Construir el gobierno de la ciudad como se hizo con la Marea, entre todos para sumar en vez de dividir, es la voluntad de su equipo, ha indicado Ferreiro, quien ha citado la memoria histórica, ningún desahucio, no subvencionar las corridas de toros, el fomento del pequeño comercio o la reordenación de la fachada marítima de A Coruña como otros de los temas en los que ha avanzado la ciudad.

"Tenemos un nivel satisfactorio del cumplimiento de estas medidas en estos cien días, que pueden dar para mucho pero que en realidad son bien pocos", ha añadido el regidor.

Para terminar, Ferreiro ha asegurado que el cambio no está en lo que este gobierno pueda hacer dentro de María Pita, sino fuera, con la necesaria confianza de los ciudadanos y su "vigilancia, impulso y ayuda".