El sindicato CIG anunció ayer que presentará, en caso de aprobarse, un recurso ante el tribunal Contencioso-Administrativo contra la modificación presupuestaria pactada entre Marea y PSOE y en la que se retiran 467.000 euros del Capítulo de Personal. El cambio suprime los fondos para poder devolver este año a los funcionarios el 26,23% de la paga extra devengada por el PP en 2012, tal y como obliga el decreto aprobado por el Gobierno central el 12 de septiembre.

La Marea anunció el jueves que la formación votará en el próximo pleno en contra de los dos votos particulares presentados por PP y BNG para abonar el reintegro este año, si bien ayer mismo la concejal de Xustiza Social, Silvia Cameán, se comprometió a incluir los fondos para la paga en los presupuestos de 2016.

La formación que sustenta el Ejecutivo entiende que la prioridad es sacar adelante la modificación del presupuesto para poder pagar facturas pendientes y ello solo será posible si no se cambia una coma del acuerdo al que se había llegado con los socialistas.

Los concejales del PSOE ya mostraron su negativa a aceptar cualquier cambio, por mínimo que sea, al votar en el pleno del 14 de septiembre en contra de la modificación del presupuesto que incluía una enmienda del BNG para incorporar 30.000 euros a Igualdade.

La CIG reprocha a la concejal de Facenda, Eugenia Vieito, que el Gobierno local haya cambiado de opinión sobre la extra en cuestión de 15 días. "En la primera y única mesa general de negociación a la que fuimos convocados nos dijo que se iba a devolver la extra este año. Ahora dicen lo contrario", aseguraba ayer el presidente de la Junta de Personal y representante de la CIG, Roberto Tizón.

La central sindical, que también acusa al PSOE de haber cambiado de opinión sobre esta cuestión, aseguraba ayer que, en caso de no abonarse la paga este año, "será complicado aplicarles [al Gobierno] el principio de buena fe".

El Ejecutivo municipal también asegura que el decreto aprobado por el Gobierno de Mariano Rajoy exime de cumplir este año con esta devolución de la extra a las administraciones cuya situación financiera lo impida, algo que, aseguran, ocurre en A Coruña "por la mala gestión económica del PP".

Según fuentes del Gobierno local, la modificación del presupuesto debe aprobarse "por encima de todo" al incluir 2,5 millones de euros para el pago de facturas y otras partidas relativas a servicios de "emergencias sociales". El voto en contra de Marea en el próximo pleno puede, sin embargo, no ser suficiente para preservar la integridad del acuerdo que exigen los socialistas. Si PP y BNG se unen para votar a favor de alguna de las enmiendas, como en las que ambos proponen reservar este 2015 fondos para la extra de los funcionarios, los ediles de Marea precisarían sumar el voto en contra del PSOE para tumbarlas.