Las obras sin licencia en terrenos portuarios que denunció el Gobierno local de Marea el pasado mes de agosto en la Marina tienen un precedente de hace diez años. Ha transcurrido una década desde que el Ejecutivo municipal concedió, también en una superficie de la que el Puerto era titular, el permiso para obrar en dos construcciones que ya habían sido inauguradas: ni más ni menos que dos moles de hormigón y cristal como el palacio de congresos y el centro de ocio.

¿Cómo trascendió esa ilegalidad urbanística si las obras ya habían concluido y los edificios eran utilizadas por congresistas y visitantes? Porque una Junta del Gobierno local del alcalde socialista Francisco Vázquez otorgó la autorización con retraso, el 14 de octubre de 2005. LA OPINIÓN informó dos días después.

El Ayuntamiento no solo permitió el inicio de los trabajos y su continuación en Palexco y en la instalación de ocio -entonces conocida como El Puerto Centro de Ocio, ahora Los Cantones Village- pese a carecer de licencia, también abrió sus puertas al público y a usuarios sin el correspondiente permiso de apertura. Y eso que sabía que la Xunta tenía conocimiento de que los edificios carecían de licencia de obras.

El Gobierno gallego se negó a emitir un informe preceptivo sobre ambas construcciones después de que el Ayuntamiento no les remitiese la confirmación de que ambas contaban con autorización municipal. Por ello la Xunta instó en junio al Ejecutivo local a que aportase informes técnicos y jurídicos sobre la conformidad del otorgamiento de la licencia de legalidad urbanística o a que incoase un expediente de reposición de legalidad. El Concello no lo hizo y cuatro meses después, ya con los edificios inaugurados, los legalizó con la concesión de sus permisos.

El entonces presidente del Puerto, Guillermo Grandío, admitía que ignoraba que tanto el palacio de congresos como el centro de ocio funcionaban sin licencias de obra y apertura y que se había enterado al leer este periódico.

Aquella situación tiene similitudes con una denuncia reciente del Gobierno de Marea, que acusa a la Autoridad Portuaria de reformar la superficie de la Marina sin autorización. La entidad que preside Enrique Losada argumenta que la mayor parte de los terrenos afectados son de dominio público portuario, por lo que asegura que las obras no precisan la solicitud de licencias si son promovidas por organismos portuarios. El PP, que gobernaba cuando empezó la remodelación y la construcción de los túneles de la Marina y O Parrote, apoya la postura del Puerto, que mantiene contactos con el Gobierno local para solucionar el conflicto. De momento no se ha alcanzado ningún acuerdo.